Pamplona. El presidente catalán en funciones, Artur Mas se reunió ayer, por primera vez tras las elecciones catalanas, con el líder de ERC, Oriol Junqueras, que le confirmó el rechazo de su formación a entrar en el nuevo Gobierno catalán. Así lo informaron fuentes tanto de CiU como de ERC, que pusieron el énfasis en que no habrá Ejecutivo de coalición, pero que Esquerra sí ha puesto sobre la mesa la posibilidad de dar facilidades para que Mas sea investido presidente.

Ambos dirigentes, que se reunieron durante una hora mientras comían, ya mantuvieron el martes una primera conversación telefónica, según confirmaron también fuentes de ambas formaciones.

Junqueras mantuvo posteriormente una conversación telefónica con el líder de ICV-EUiA, Joan Herrera, para intercambiar impresiones sobre el comienzo de las negociaciones.

filtraciones Según fuentes de ERC, Junqueras trasladó a Mas la disposición de su partido a facilitar su investidura y la constitución del nuevo Govern, pero sin formar parte de él, ya que Esquerra considera que el papel que le corresponde ahora es el de ejercer una "oposición responsable" desde fuera del ejecutivo. Esto no será un obstáculo, sin embargo, aseguraron las mismas fuentes, para que ERC exprese su voluntad de "colaborar" con el Gobierno de CiU e incluso garantizar su "estabilidad" parlamentaria, si este pone encima de la mesa una "agenda nacional clara", que incluya el referéndum de autodeterminación, y suaviza las medidas de austeridad con una política económica más "social".

Sin saber cómo evolucionarán las conversaciones entre ambas formaciones, la dirección de ERC quiere transmitir a la formación que ha ganado las elecciones y que tiene la responsabilidad de formar gobierno, CiU, que podrá contar con su apoyo y que será un socio "leal", si esta última mantiene sus compromisos electorales. Al parecer, las conversaciones CiU-ERC girarán en torno a cuatro ejes: investidura, presupuestos, acción exterior y referéndum.