Bilbao. La colaboración entre el Estado español y el francés en materia antiterrorista vivió ayer un hito con la primera detención de un miembro de ETA por parte de la Policía española para entregarlo al país vecino, donde tiene pendiente de cumplir una condena de tres años de prisión. Jon Iñaki Pérez Aramburu fue arrestado a las 9.00 horas en Irun por agentes de la Comisaría General de Información de la Policía, en virtud de una orden de extradición de las autoridades galas de 2005. El detenido, en paradero desconocido desde 1995, pasará hoy a disposición del Juzgado Central de Instrucción número 4 de la Audiencia Nacional.
La vicepresidenta del Gobierno español, Soraya Sáenz de Santamaría, felicitó ayer a la Policía por la detención del activista. En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, destacó que "es la primera vez que un miembro de ETA es detenido en nuestro país para ser entregado a las autoridades judiciales francesas por un delito cometido en su territorio". El Ministerio del Interior afirmó en un comunicado que Jon Iñaki Pérez Aramburu participó en 1995 en un ataque con cócteles molotov contra una patrulla de la Ertzaintza en Errenteria. Este ataque provocó que el conductor perdiera el control del vehículo y atropellara a dos viandantes. Además, los cinco ocupantes de la patrulla resultaron heridos, uno de ellos de extrema gravedad. Tras esta acción, huyó y se integró en ETA. Pérez Aramburu nació en 1964 en Donostia y fue un militante destacado de Jarrai.
El Tribunal Correccional de París le juzgó por el ataque a la Ertzain-tza en noviembre de 1999, en un macroproceso contra veinticinco presuntos activistas y colaboradores de ETA, entre ellos José Javier Arizkuren Ruiz, Kantauri, y Julián Atxurra Egurola, Pototo, supuestos dirigentes de la organización. El 23 de febrero de 2000, este tribunal francés condenó en rebeldía a Pérez Aramburu a tres años de cárcel por el delito de pertenencia a banda armada.