madrid. La división española de la organización ecologista World Wide Fund for Nature (WWF) decidió ayer eliminar de sus estatutos el artículo 6 en el que se señala que el presidente fundador y de honor de la asociación en lo que al Estado se refiere es el rey. Así lo decidieron con el 94% de los votos a favor los socios de esta organización, en una asamblea general extraordinaria celebrada en la mañana de ayer a puerta cerrada en el Jardín Botánico de Madrid. La decisión, fundamentada en el escándalo de la caza de un elefante en Botswana por parte del monarca español, se transmitió a través de una nota de prensa sin que los responsables de WWF España hablaran con los medios de comunicación.

En el escrito emitido por la organización ecologista se aclaraba que votaron a favor de quitar la presidencia de honor de la entidad al rey 226 socios, 13 se mostraron en contra, y hubo un voto nulo y cinco abstenciones. El sistema de votación permitió la representación de voto de quienes no asistieron personalmente a la cita de ayer.

argumento Los socios tuvieron que debatir y votar sobre la propuesta de supresión del artículo 6 de los Estatutos sociales, el cual recoge que "es presidente fundador y de honor de la asociación su majestad el rey don Juan Carlos I de España".

Con esta votación, los socios de WWF apostaron por eliminar de su organigrama honorífico al monarca, que ostentaba el cargo desde la fundación de la organización en España, en 1968.

En el comunicado, el secretario general en España de WWF, Juan Carlos del Olmo, señalaba que el rey fue nombrado entonces a propuesta de un grupo de personas interesadas en la naturaleza y en la caza, ya que en aquella época era frecuente ver "la naturaleza a través de la caza", pero ahora "la organización ha evolucionado".

La junta directiva de WWF/España decidió el pasado abril iniciar los trámites para cambiar sus estatutos y prescindir, si así lo deseaban los socios, de figuras honoríficas. En el comunicado de ayer explicaba que esta asamblea ha tenido lugar después de la "amplia controversia" creada en relación a la cacería en la que participó el rey en Botswana.