jerusalén. El Tribunal de Distrito de Jerusalén declaró ayer culpable al exprimer ministro Ehud Olmert de un caso de corrupción e inocente de otros dos, informa el diario Yediot Aharonot en su versión digital. Olmert fue encontrado culpable de un caso de corrupción por abuso de confianza en el sumario conocido como Centro de Inversiones, mientras fue exonerado en los de Rishon Tours y Asunto Talansky, en los que se le acusó de fraude, abuso de confianza y falsedad de documentos, entre otros delitos, según la fuente.

En el caso del Centro de inversiones, la Justicia encontró al ex primer ministro culpable solo de abuso de confianza, pese a que la acusación trató de inculparlo también por los delitos de conflicto de intereses y fraude, al entender que concedió favores y benefició desde su cargo a un exsocio en un despacho de abogados, Uri Meser. El caso se produjo en 2002, cuando era ministro de Industria y, según la Fiscalía, abusó de su autoridad para sacar adelante un proyecto urbanístico de Meser.

En el caso Rishon Tours la Fiscalía le acusaba tanto a él como a su asistente personal y jefa de buró, Shula Zaken, de haber presentado facturas duplicadas y triplicadas a distintos organismos e instituciones judías por los gastos de desplazamientos al extranjero semioficiales realizados entre 1993 y 2003, cuando Olmert fue alcalde de Jerusalén y ministro de Industria, Comercio y Trabajo. La acusación trató de demostrar que la agencia de viajes Rishon duplicaba las facturas de billetes y reservas de hotel, lo que reportaba unos beneficios que se depositaban en una cuenta privada a nombre del exprimer ministro. Aunque Olmert fue exonerado, el tribunal declaró a Zaken culpable de fraude, abuso de confianza y obtención de beneficios de forma fraudulenta.

En el Asunto Talansky del que fue declarado inocente Olmert estaba involucrado el empresario estadounidense Morris Talanksy, que reconoció en un interrogatorio haberle entregado sobres con 600.000 dólares en efectivo que, según la Fiscalía, ocultó a Hacienda.