Vitoria. El arresto ayer en Londres de Anton Troitiño e Iñaki Lerin, dos de los activistas más buscados, eleva a cinco las detenciones que han golpeado la estructura de ETA en tan solo una semana lo que, a ojos de la mayoría de la clase política, demuestra la debilidad de la organización y acerca su desaparición.

"Cada vez hay menos peces en la pecera", resumió el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, que agradeció al Reino Unido su colaboración para hacer posibles unas detenciones que valoró especialmente ya que, tras el cese de la actividad armada de ETA, dijo, "cada vez es más difícil pescarlos".

Troitiño y Lerin trataban de hacer vida normal en Inglaterra, donde acudieron para refugiarse de las órdenes de busca y captura que pesaban sobre ellos, condenado el primero por cometer una veintena de asesinatos en el comando Madrid -y huido desde que hace más de un año la Audiencia Nacional decidiera su vuelta a prisión tras haberlo excarcelado-; acusado el segundo de haber formado parte del comando Donosti. De hecho, según los agentes británicos que registraron su domicilio, en él no encontraron rastro de armas aunque los miembros de ETA siguen llevándolas consigo pese a las recomendaciones emitidas por organismos como el GIC.

cada vez más cerca "Tengo la íntima convicción, basada en los datos que disponemos, de que está más cerca que lejos, evidentemente, la disolución de la organización terrorista ETA", dijo el ministro del Interior, que subrayó que la organización está acusando los "golpes" policiales -se han producido 16 arrestos en lo que va de año- en el corazón de una estructura clandestina "debilitada y diezmada". "Sus militantes están dispersos por Europa, sin cobertura y muy vigilados", por lo que en cuanto se mueven "se les echan encima", subrayó el jeltzale Josu Erkoreka, que pidió al MLNV que reflexione sobre los pasos que deben de dar para que esta situación no desemboque en una imagen de "mayor claridad en la derrota".

Por su parte, la izquierda abertzale, por boca de Rufi Etxebarria, leyó la otra cara de la moneda lamentando que el Gobierno siga anclado en "políticas de otros tiempos" no acordes con "la decisión histórica" adoptada por ETA, y siga con detenciones como la de Troitiño, que atribuyó a la "injusta" doctrina Parot.

Los dos detenidos rechazaron ayer mismo ante el juez ser extraditados a España, por lo que estarán en prisión preventiva hasta el próximo 20 de julio. Eneko Gogeaskoetxea, detenido igualmente en Inglaterra, agotó también la vía de recurso por lo que será extraditado en diez días. Y por su parte, los dos últimos detenidos en Francia fueron ayer trasladados a París para pasar ante el juez.