vitoria. Aralar denunció ayer que la parlamentaria Aintzane Ezenarro, expulsada de esta formación, está negociando "en su nombre" con los grupos de la Cámara una proposición de ley para crear el Instituto de la Memoria, Convivencia y Derechos Humanos.
Aintzane Ezenarro, que está fuera de Aralar por haber incumplido la disciplina del partido y votar a favor de una ponencia de paz sin garantizar la presencia de la izquierda abertzale de forma permanente, está manteniendo contactos con PNV, PSE, y Ezker Anitza-IU para tratar de llegar a un texto conjunto.
El hecho de que Ezenarro esté negociando el texto "en nombre del grupo" de Aralar ha sentado muy mal en esta formación porque el Instituto de la Memoria es "una figura muy importante", explicaron. Además, el hecho de que el grupo se haya enterado de la existencia del borrador cuando ya está "cerrado y cocinado", ha ahondado aún más la crisis interna entre Ezenarro y el partido, según las mismas fuentes.
Desde Aralar se subrayó que "es triste que Aintzane Ezenarro se convierta en una marioneta en manos de los intereses partidistas de PSE y de PNV" y se reiteró que en este tema "no está siguiendo ningún criterio de partido y se está representando solo a ella misma", lo cuál "es muy grave". Según estas fuentes, "al PSE le interesa mucho unirse a la figura de Ezenarro para tapar su inacción desde el comunicado de ETA", y por eso busca su aval en una lectura sobre la memoria y las víctimas que, a juicio de esta formación, "es muy sesgada".
