Bilbao. Varios miles de personas recorrieron ayer las calles de Bilbao en protesta por el juicio que se celebra en la Audiencia Nacional contra 13 integrantes de las organizaciones D3M y Askatasuna por integración y colaboración con organización terrorista. En la cita, los imputados reclamaron el fin de los "juicios políticos" y señalaron que su único delito es "trabajar políticamente en defensa del cambio social y político".
Organizada por el movimiento en defensa de los derechos civiles y políticos Eleak, a la manifestación acudieron, entre otros, el secretario general de EA, Pello Urizar, la representante de la izquierda abertzale Maribi Ugarteburu, el coordinador de Aralar de Bizkaia, Iosu Murgia, el diputado de Amaiur Xabier Mikel Errekondo y el portavoz de Alternatiba, Oskar Matute.
Bajo el lema Eskubide guztiak, proiektu guztientzat. Epaiketa politikorik ez! (Todos los derechos para todos los proyectos. No a los juicios políticos) los manifestantes marcharon hasta El Arenal, donde los imputados leyeron un comunicado.
La imputada Arantza Urkaregi destacó que "desde el principio hemos dicho que este era un juicio político" y en las dos sesiones que se han desarrollado en la Audiencia Nacional "hemos visto cómo el fiscal y sus testigos, policías y guardias civiles, basan sus acusaciones en que hemos dado ruedas de prensa, hemos formado parte de listas electorales... Esa es la base que tienen".
Por su parte, la también imputada Amparo Lasheras denunció que este lunes los acusados volverán a la Audiencia Nacional para "seguir escuchando unas acusaciones elaboradas por los servicios de inteligencia de la Guardia Civil en la que convierten la actividad política pública en una prueba de lo que consideran un delito como es trabajar por una ideas que defienden la independencia y el cambio social". Tras señalar que "Euskal Herria tiene derecho a votar ideas por las que ha luchado durante décadas hasta abrir un nuevo ciclo", lamentó las "barreras levantadas", entre las que a su juicio se encuentra este juicio.