madrid. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, pondrá peaje en las autovías dependientes de la administración autonómica, entre ellas la M-45 y la M-501. Así lo anunció ayer en una entrevista publicada por el diario ABC, en la que explicaba que no tendrá "más remedio" que hacerlo porque el mantenimiento del "montón" de autovías de la región cuesta 30 millones al año a la Hacienda de la Comunidad. Aguirre, además, avisaba de que "habrá que recortar" en otras "muchísimas cosas" y mencionaba en este sentido las "muchísimas subvenciones" que concede la Comunidad.

La mandataria madrileña repetía igualmente que le gustaría "no tener que pagar el máster a los hijos de las familias adineradas" y que el Gobierno de la Nación le dejara "cobrar lo que cuesta". El problema, apuntaba Esperanza Aguirre, es que "la Comunidad no puede sostener la sanidad, la educación, los servicios sociales y el transporte con los ingresos que tiene ahora".

recortes Preguntada por los "recortes" que el Consejo de Gobierno abordará que ella preside aprobará hoy mismo mañana, Aguirre replicó irónica: "¿Por qué llama usted recortes a lo que es devolver a la sociedad lo que nunca debió perder?". Como ejemplo puso el metro de Madrid, que "hasta el año 1976 era una empresa privada". "Mi abuelo tenía acciones y ganaba dinero, y costaba una peseta. El Gobierno de la UCD la nacionalizó, y el problema ahora es que tenemos que pagar el 60% del coste", explicaba la mandataria popular. Ante la duda del entrevistador de si el Gobierno autonómico no descarta privatizar el Metro, contestó: "Yo no descarto introducir mejoras en todos los servicios públicos".

En todo caso, Aguirre se declaró convencida de que "a lo largo de este año el Gobierno tendrá que afrontar muchas reformas y muy importantes" y repitió su idea de que "la dosis de la medicina, cuando es amarga, más vale darla de una vez que a poquitos".