vitoria. El vicecoordinador de Aralar y parlamentario de la formación, Dani Maeztu, cree que sus tres compañeros en la Cámara vasca, Aintzane Ezenarro, Oxel Erostarbe y Mikel Basabe, pondrán sus cargos a disposición del partido, tal y como ayer les pidió la Ejecutiva. A juicio de la dirección de la formación liderada por Patxi Zabaleta, los tres parlamentarios incumplieron el mandato de votar en contra de toda propuesta de ponencia parlamentaria que no recoja de forma expresa que trabajará "sin exclusiones".
En declaraciones a Radio Euskadi, Maeztu señaló que "no hay ningún plazo establecido" para que Ezenarro, Erostarbe y Basabe pongan sus cargos a disposición del partido, "porque creemos que vamos a tener una respuesta a esa petición sin necesidad de tener que poner ningún plazo".
Maeztu subrayó que "ha habido una quiebra de confianza total" por la actitud de los tres parlamentarios "hacia una decisión tomada por el máximo órgano del partido después de la asamblea, que es la Ejecutiva", y recordó que desde su formación han defendido siempre que, aunque las actas de parlamentario son personales, "se presentan debajo de un proyecto político" y que, por ello, "es a Aralar a quien le corresponde gestionar los intereses políticos". "Y en un momento en que se ha producido esa quiebra de confianza, creemos que lo que nos corresponde es pedir que pongan sus cargos a disposición del partido", añadió.
Asimismo, explicó que, bajo la premisa de que los tres parlamentarios pongan sus cargos a disposición de la formación, Aralar pretende iniciar conversaciones para determinar cómo puede gestionarse esa situación. El abertzale fue más allá y rechazó ponerse en la tesitura de tener que romper el grupo parlamentario que, a su juicio, "ha actuado hasta ahora de una manera muy buena" y "con una coordinación estupenda". En este sentido, tras recalcar que ha habido una quiebra de confianza, ha subrayado también que se puede reconducir la situación.
Maeztu hizo hincapié en que, en opinión de Aralar, el diálogo sin exclusiones es la base para recomponer la convivencia y, sobre todo, "para poner las bases de la pacificación".