Bilbao. El especial celo que ha mostrado la Audiencia Nacional respecto a la manifestación a favor de los presos que se celebrará mañana en Bilbao obtuvo ayer respuesta de sus convocantes, que anunciaron que la misma discurrirá en completo silencio. En un auto con fecha del 30 de diciembre, el Juzgado Central de Instrucción número tres instaba a la Consejería de Interior a disolver la concentración "de forma inequívoca" si se exhiben fotos de presos o emblemas de asociaciones ilegales, o si se lanzan proclamas a favor de los reclusos. Como consecuencia de ello, la plataforma Egin Dezagun Bidea, que está detrás de su convocatoria, avanzó que los participantes evitarán cualquier expresión explícita de apoyo a los presos de ETA.

La contundencia del auto redactado por la Audiencia Nacional, que no prohibía la marcha -tal y como lo había requerido la asociación Dignidad y Justicia- pero coartaba en gran medida su transcurso, han obligado a este posicionamiento de sus promotores. Éstos explicaron ayer que la decisión de que se desarrolle en silencio supone "un ejercicio de responsabilidad", al tiempo que exigieron al Departamento de Interior "responsabilidad y rigor". Mientras, la consejería que dirige Rodolfo Ares prepara un dispositivo policial muy importante para mañana. También está previsto que se reúna la Mesa de Crisis de Interior para afrontar cualquier posible incidencia.

Al mismo tiempo, la consejería se han puesto en contacto con la convocante de la marcha, la exjugadora del Athletic Eba Ferreira, para que, a la hora en que está convocada -partirá a las 17.30 horas del pabellón de La Casilla-, se dirija a su cabecera para que mandos de la Ertzaintza le comuniquen, de viva voz, los requerimientos exigidos por la Audiencia española para su celebración. El propio auto del juzgado exigía al departamento que comunicara a los organizadores a qué se exponen si incumplen sus directrices. Si los participantes se separan un milímetro de las mismas, la Policía vasca deberá actuar "independientemente de la intensidad del incumplimiento y sin valoraciones complementarias". Poco margen de maniobra, por tanto, para los dirigentes de Interior.

300 autobuses Los portavoces de la plataforma Egin Dezagun Bidea Beñat Zarrabeitia, Jone Artola e Ingo Niebel, comparecieron ayer ante los medios en las escalinatas del Ayuntamiento de Bilbao para hacer un último llamamiento a la participación en la marcha. Estuvieron acompañados de miembros de los distintos colectivos que se han adherido como la secretaria general de LAB, Ainhoa Etxaide, el dirigente de la izquierda abertzale Tasio Erkizia, o el portavoz de Alternatiba, Oskar Matute. Zarrabeitia explicó que, hasta el momento, se han recogido más de 15.000 adhesiones y se han programado unos 300 autobuses para acudir mañana a la capital vizcaina, lo que indica que será "una movilización colosal, la mayor de los últimos años". Por su parte, el portavoz de la izquierda abertzale Joseba Permach afirmó en Info7 Irratia que la marcha supondrá "un grito enorme para que tarde o temprano" el Gobierno español "empiece a respetar los derechos de los presos".