Madrid. Los futuros candidatos del PSOE a la Presidencia del Gobierno saldrán elegidos del voto de los ciudadanos, sin la obligación de ser militantes, y necesitarán menos avales que ahora. Así consta en el texto de la ponencia marco del 38 congreso que los socialistas celebrarán a primeros de febrero en Sevilla.

Un texto aún sujeto a debate que aboga por seguir el modelo que los socialistas franceses pusieron en marcha para designar a su candidato a la Presidencia de la República, si bien no precisa qué condiciones habrán de cumplir los ciudadanos no militantes que quieran participar. Eso, según la ponencia, lo decidirá la Ejecutiva Federal en su momento.

Los socialistas, por tanto, se proponen reformar el sistema de elección de los candidatos, pero también cambiar completamente el funcionamiento del partido, de forma que se plantea la creación de la figura del "afiliado directo" en el marco de lo que en el texto se denomina "agrupación virtual".

De hecho, el PSOE aboga por modernizar sus agrupaciones y abrir el debate para adelantar la edad de voto de los 18 a los 16 años.

En esta línea de modernización, algo de lo que tendrá que informar cada dirección local, el Partido Socialista incide en la necesidad de contar con más afiliados, para lo que abre nuevas campañas de captación.

"Es necesario seguir incrementando el número de personas dentro de nuestra organización, cuantas más seamos mejor escucharemos las demandas de la sociedad", indica el PSOE en la ponencia marco, cuyo texto han coordinado Marcelino Iglesias y Jesús Caldera.

El afán reformador de los socialistas alcanza a la dirección federal, en cuya elección y funcionamiento habrá "mayor democracia interna".

Por un lado, el PSOE sugiere desbloquear las listas y rebajar el porcentaje de voto para obtener representación, en concreto para la elección de los miembros de los comités provinciales, regionales y el federal.

En este caso, serán elegidos los integrantes de las listas que, habiendo conseguido al menos el 15% de los votos, atraigan más apoyo.

"La igualdad de condiciones es indispensable para los socialistas", escriben en la ponencia. El PSOE, en este apartado, aboga por modificaciones estatutarias que incluyan "la figura del precandidato".

El miembro del PSOE que se plantee aspirar a la Presidencia del Gobierno, o a las alcaldías importantes o Presidencias autonómicas, también deberá someterse a nuevas reglas. Se trata de buscar "un nuevo tipo de liderazgo" en "diálogo permanente con la sociedad", se dice en el texto, con la necesidad de "seguir abriendo la organización, buscando la complicidad de millones de progresistas que quieran participar, sin la necesidad de militar en el PSOE".

Para el PSOE, además, sería "conveniente" reducir el porcentaje de avales necesarios para optar a la candidatura, de modo que si ahora se exige el 10% para el Gobierno, el 15% para la comunidad autónoma y el 20% para la alcaldía, en el futuro se podría rebajar a 5%, 10% y 15%, respectivamente.