Donostia. La actual portavoz de la Diputación foral de Gipuzkoa, Larraitz Ugarte, ha denunciado al PNV de Oñati por la utilización de una imagen en la que aparecía su hija, menor de edad, en el folleto que recoge el balance municipal de la formación jeltzale al frente del Ayuntamiento de la citada localidad.
Ugarte, en su denuncia, exige a la formación jeltzale una rectificación pública mediante un escrito a publicar en la prensa en el que el PNV admita el error y pida perdón por utilizar la foto sin el permiso pertinente, así como una compensación económica de 3.000 euros por los daños causados en la imagen de la menor. Así, el juicio tendrá lugar hoy, a partir de las 10.00 horas en los juzgados de Bergara.
El caso, sin embargo, ya ha tenido recorrido en los juzgados, puesto que arrancó el pasado 10 de junio, cuando el PNV de Oñati recibió la primera citación para acudir al juzgado. Diez días después, el 20 de junio, se celebraba la primera vista de medidas cautelares, que no le fueron concedidas a la parte denunciante.
Las partes Desde la Diputación foral de Gipuzkoa, consultada por este periódico, explicaron que Larraitz Ugarte no piensa entrar a hacer valoraciones al respecto, ya que entiende que el caso en cuestión corresponde única y exclusivamente al ámbito privado de su vida.
Mientras, en el otro lado de la balanza, fuentes jeltzales aseguraron que desde que arrancó el caso han tratado de ofrecer soluciones a la parte demandante, "pero Larraitz no ha estado dispuesta a ello". En concreto, incidieron en que Ugarte se ha negado a negociar una salida al problema incluso después de llegar al cargo que actualmente ostenta en la institución foral.
Así, según la misma fuente, la actual portavoz foral habría enviado ayer una última oferta al PNV: el escrito de rectificación y los costes del proceso judicial más una compensación económica de 1.500 euros. Una propuesta que desde el partido jeltzale prefirieron desestimar y dejar que sean los jueces quienes diluciden la disputa.
Siendo esta la situación de partida, desde el PNV señalaron que los autores del folleto tuvieron en cuenta en todo momento la estricta legislación existente para la protección de la imagen del menor, y que la fotografía de la discordia, tomada en la ludoteca Txaloka de Oñati, ya había sido publicada en la revista mensual Kontzejupetik, publicación institucional del Ayuntamiento de la localidad. "Lo que no sabían era que la imagen fue tomada en Oñati", explicaron.