vitoria. Finalmente, la ene del PNV se quedará como está. Después de que el partido propusiera modificar su denominación para pasar a llamarse Partido Nacional Vasco -en lugar de Nacionalista-, las asambleas territoriales han tomado nota del mandato de las bases y han optado por conservar sin alteraciones el nombre con el que fue bautizada la formación en 1895 por Sabino Arana. Según explicaban ayer fuentes jeltzales a DNA, las organizaciones municipales han presentado un centenar de enmiendas a la propuesta, que se encuadra en el cambio de estatutos del partido con vistas a la VI Asamblea General que tendrá lugar los días 13, 14 y 15 de enero en el BEC de Barakaldo. El número de enmiendas registradas da fe del debate entre las bases que, en sí mismo, se constituía en uno de los objetivos que perseguía el PNV al proponer la modificación. La Asamblea Territorial de Araba, reunida anteayer, y sus homólogas en Bizkaia y Gipuzkoa, citadas ayer, terminaron tomando en consideración las objeciones de las organizaciones municipales y apostando por mantener la actual designación del partido.

La propuesta pasaba por introducir el término nacional en el nombre del partido para enfatizar la vocación de liderazgo de una formación que se encargó de la puesta en marcha de las instituciones de la CAV desde el Gobierno Vasco, al tiempo que actualizaría la denominación del PNV en un momento en que "nadie duda de la existencia de la nación vasca", según explicaban desde Sabin Etxea. Además, se apelaba a la necesaria "coherencia", desde el nombre del partido, con el documento Euskadi, nación europea, que también será aprobado en la cita de enero. Otro de los factores que podría haber contribuido a inclinar la balanza a favor del cambio pasaría por constatar la connotación negativa que despierta el término nacionalista en Europa. En concreto, en la formación se palpaba "preocupación" en el continente.

el proceso El cambio afectaría a los dos primeros artículos de los Estatutos Nacionales del partido, y ya fue postulado en 1995, cuando la formación entonces presidida por Xabier Arzalluz registró el nuevo nombre en el centenario del nacimiento de las siglas. La formación retomó la discusión este año aprovechando la propuesta de revisión de sus estatutos, encuadrada en la VI Asamblea General que renovará o reelegirá a nueve cargos del EBB y que aprobará las líneas de actuación políticas y económicas del PNV para los próximos cuatro años. La modificación no afectaría al nombre en euskera, pero sí a su marca en inglés, que pasaría a ser Basque National Party. El único precedente remitía a 1921, cuando la marca política fue rebautizada al dividirse en Comunión Nacionalista Vasca y Aberri, que volvieron a fusionarse en 1930.