La juez Murillo durante el juicio a 'Txapote'. Foto: efe
Murillo renuncia a juzgar a 'Txapote' tras llamarle "cabrón"
aún así, considera que su imparcialidad sigue "inalterada"
Revocado el auto que el juez Ruz dictó contra tres altos mandos policiales por el denominado 'caso Faisán'
DONOSTIA. La magistrada de la Audiencia Nacional Ángela Murillo decidió ayer abstenerse de juzgar al exjefe militar de ETA Francisco Javier García Gaztelu, Txapote, y a otros tres presuntos activistas a los que el miércoles llamó "cabrones" durante el juicio, para no causar "perjuicio alguno" a la causa.
"He decidido abstenerme del conocimiento de este asunto en aras de no causar perjuicio alguno al procedimiento, a las partes procesales, a los acusados en situación de prisión y a las víctimas", anunció la presidenta del tribunal que juzgaba a los cuatro encausados por el asesinato en 2001 del concejal de UPN en Leitza José Javier Múgica.
Murillo reconoció que su expresión fue "ciertamente desafortunada" y, aunque considera que su imparcialidad objetiva se mantiene "inalterada", comunicó su renuncia al presidente de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, que aceptó su abstención. La sección cuarta de la Audiencia Nacional acordó en un auto que el juicio se repita hoy desde el inicio con un nuevo magistrado en el tribunal -José Ricardo de Prada- y presidido por la juez Carmen Paloma González.
Al hilo de esta cuestión, a preguntas de los periodistas, el presidente del Euzkadi Buru Batzar, Iñigo Urkullu, rechazó los "exabruptos" de la juez Murillo, aunque dijo que no son comparables a la actitud de los presuntos militantes de ETA encausados. Por su parte, el vicesecretario de Comunicación del PP, Esteban González Pons, aseguró que le da "rabia" que se cuestione a la magistrada de la Audiencia Nacional y no a los activistas juzgados, mientras que el ministro de Presidencia, Ramón Jáuregui, dijo entender la "reacción sentimental" de Murillo, aunque vio "inapropiado" el comentario.
'CASO FAISÁN' Por otra parte, la Audiencia Nacional reprochó al juez instructor del chivatazo a ETA que se produjo en el bar Faisán de Irun, Pablo Ruz, que existen "inconsistencias relevantes" en su instrucción, por lo que debe llevar a cabo diligencias "complementarias o de contraste" ajenas a la tesis del equipo investigador. El Pleno de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional dictó ayer el auto en el que se revoca el auto de procesamiento que Ruz dictó contra tres altos mandos policiales como autores del chivatazo a ETA que se produjo el 4 de mayo de 2006.
