vitoria. El anuncio del "cese definitivo" de ETA parece haber eclipsado en buena medida la precampaña de las generales, pero ayer se sorteó la composición de las mesas electorales, síntoma incuestionable de la inminencia de los comicios. Dentro de una semana -a las 0.00 horas del viernes día 4- se abrirá oficialmente la campaña de las generales y los partidos vascos, tras ir presentando públicamente en las últimas semanas a sus cabezas de lista con escasas novedades en general salvo por la irrupción de Amaiur en el panorama electoral, comienzan a desgranar sus programas electorales.
Ayer fue turno del PNV, que hizo pública su propuesta a los electores con una premisa que marca también la que será una de las pugnas más interesantes que se dirimirán en las urnas: la que enfrentará a PNV y Amaiur por el liderazgo de la representación de la CAV en el Congreso. "Éste es el único programa electoral pensado en Euskadi y para Euskadi", proclamó ayer el número uno por Bizkaia de los jeltzales, Josu Erkoreka, en la rueda de prensa en Gasteiz que sirvió como marco de presentación del documento y en la que compareció junto con sus homólogos de Araba, Emilio Olabarria, y Gipuzkoa, Arantxa Tapia. El argumentario no es baladí: más allá de la pugna por La Moncloa -previsiblemente resuelta en favor de Mariano Rajoy en detrimento de Alfredo Pérez Rubalcaba-, las encuestas apuntan que la coalición soberanista podría hacerse con unos seis diputados y acceder a formar grupo propio en la Cámara Baja, pugnando abiertamente por ser la primera formación vasca en el Congreso.
"PP y PSOE, si al final se deciden a hacer público algún programa, nunca será un programa pensado en Euskadi ni para Euskadi -sostuvo Erkoreka-. Otros, probablemente, como Bildu, ni siquiera tendrán programa".
El eje de acción que ya perfiló el martes en Gernika el presidente del Euzkadi Buru Batzar de la formación jeltzale, Iñigo Urkullu, de lograr en 2015 -al final de la legislatura que se iniciará el 20-N- la ratificación de un nuevo estatus político para Euskadi sobre la base de la bilateralidad constituye uno de los cuatro pilares sobre los que se construye el programa electoral jeltzale ayer presentado, que presenta cuatro retos, según explicó Erkoreka, relativos a: creación de empleo, defensa de los intereses vascos, mantenimiento del Estado de Bienestar y consolidación de la paz.
construcción nacional Hace especial hincapié el documento, de hecho empieza precisamente por ahí, en la puesta en valor del trabajo realizado en la última legislatura, con la consecución de 18 de las 36 transferencias pendientes del Estatuto de Gernika, como el mejor aval, al que suman el blindaje del Concierto Económico, por ejemplo. Retoman así Erkoreka, Olabarria y Tapia uno de los leit motiv del discurso electoral del PNV frente a Amaiur: como decía Urkullu en el Alderdi Eguna "mientras estaban en sus vanguardias y rupturas, aquí, pie a tierra, hemos construido una nación".
Con todos estos mimbres, el programa electoral jeltzale presenta 77 compromisos en torno a diez prioridades: política industrial, creación de empleo, políticas sociales, infraestructuras gestionadas desde la proximidad y la sostenibilidad, sistema financiero saneado, estabilidad económica y presupuestaria, medio ambiente, derechos y libertades, refuerzo de la gobernanza europea y política exterior europea.