Donostia. Varias víctimas de ETA, entre las que se encontraban Consuelo Ordóñez, Rubén Múgica, Caty Romero y Pilar Elías, subieron ayer hasta la Casa de la Paz de Aiete no con la intención de "boicotear nada" sino para "informar" a los líderes internacionales entregándoles el libro Vidas rotas y el decálogo No a la impunidad y darles la oportunidad de "escuchar otra voz", en referencia a la voz de las víctimas, aunque la viuda del ertzaina Joseba Goikoetxea, Rosa Rodero, asesinado por ETA, estuvo en las reuniones de la Conferencia que se celebraron el domingo.

Ésa fue la intención que tenían estas víctimas por la mañana, porque cuando accedieron al parque, anunciaron que habían decidido no entrar en el Palacio, donde se acababa de reanudar la Conferencia Internacional tras un pequeño receso.

Al llegar, denunciaron que no eran "un número y nuestras familias no eran tampoco un número, eran personas con una historia detrás". Además, en la línea del secretario de Comunicación del PP, Esteban González Pons, que acusó a Kofi Annan o a Gerry Adams de no tener "ni puñetera idea" de lo ocurrido en Euskadi, estas víctimas dijeron que los dirigentes "no deben de estar nada puestas en la historia más reciente de este país, en la historia de temor en la que unos matan y otros ponemos los muertos".

Por otra parte, el hijo del dirigente socialista Enrique Múgica y el cabeza de lista de UPyD al Congreso por Gipuzkoa, Rubén Múgica, denunció que en Aiete se estaba "perpetrando uno de los ataques más virulentos a la democracia española desde la transición", "una estafa, una mentira y un insulto a las víctimas".

No entran Con esta situación y pese a haber acudir sin que nadie les hubiera invitado, según denunciaron, la invitación de los organizadores no surtió el efecto esperado en quienes subieron a Aiete: "No tenemos ninguna intención de entrar con gente que no nos ha invitado y que simplemente quiere saber de nosotros para fingir una imagen amable solo cuando hay medios de comunicación". Entregaron los libros y los decálogos a las personas de Lokarri que se acercaron y se marcharon de Aiete.

Captura de la web de 'The Guardian', ayer por la mañana. Foto: dna

Las víctimas que acudieron a Aiete, en un momento de su intervención. Foto: Ruben Plaza

Captura de ayer por la tarde de la web de la 'BBC'. Foto: dna

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