nairobi. La ONG de ayuda humanitaria Médicos Sin Fronteras (MSF) comenzó a evacuar ayer a su personal internacional en el campo de refugiados keniano de Dadaab, después del secuestro de dos cooperantes de la organización que continúan en paradero desconocido.

El español Javier López Cifuentes, uno de los máximos responsables del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en Kenia, señaló ayer que MSF había decidido dejar en el campo de refugiados de Dadaab solamente los servicios indispensables.

No obstante, desde el departamento de Prensa de MSF dijeron que, por el momento, no podían informar al respecto.

Además, la responsable de Comunicación de ACNUR en Dadaab, Bettina Schulte, dijo que la ONU ha distribuido una serie de recomendaciones de seguridad, a raíz del secuestro de las cooperantes, que incluyen la reducción de los desplazamientos y el mantenimiento de servicios mínimos.

Por su parte, López Cifuentes añadió que, además de MSF, el Gobierno de Kenia había creado un dispositivo de emergencia para tratar el secuestro de las cooperantes.

"un gran operativo de búsqueda" El portavoz de la Policía de Kenia, Erick Kiraithe, dijo ayer que había "un gran dispositivo" organizado para encontrar a las dos empleadas de MSF, que incluía dos helicópteros, pero que las fuertes lluvias en la zona dificultaban la visibilidad.

La directora de Especiales de la productora La Fábrica de la Tele, Neus Sala, que se encuentra en Dadaab grabando un reportaje, dijo por teléfono que varios testigos le habían contado que los secuestradores eran tres hombres somalíes que se hacían pasar por refugiados.

López Cifuentes recordó que "hace unas semanas" secuestraron en Dadaab un vehículo todoterreno perteneciente a la organización no gubernamental CARE International y a su conductor, que aún no han aparecido.

En las últimas semanas, Kenia ha registrado varios secuestros de extranjeros en zonas cercanas a la frontera con la volátil Somalia, en guerra civil desde 1991. El último secuestro, de una ciudadana francesa discapacitada, se produjo el pasado 1 de octubre en el turístico archipiélago keniano de Lamu (este).