Ibai Fernandez

Pamplona. El consejero de Economía del Gobierno de Navarra, Álvaro Miranda, consideró ayer "totalmente ético" el sobresueldo que, al igual que otros tres altos cargos de UPN -la presidenta navarra, Yolanda Barcina; su antecesor, Miguel Sanz; y el alcalde de Pamplona, Enrique Maya-, percibe de Caja Navarra. Los cuatro cobran una dieta añadida a la que ya perciben por su asistencia a la Junta de Entidades Fundadoras gracias a la creación en junio del año pasado de otro órgano, la Comisión Permanente de esa misma junta.

El evidente malestar que ha generado la noticia en la sociedad navarra sumó enteros ayer con la justificación por parte de Miranda del cobro opaco de estas cantidades. Los 60.000 euros se deben sumar a su salario oficial como consejero foral (64.543,22 euros) y a las dietas por asistencia a los consejos de administración de las empresas públicas que, a falta de datos oficiales, puede superar los 30.000 euros anuales.

Datos que el propio Álvaro Miranda hizo públicos ayer en el Parlamento, "sorprendido" por la polémica creada entorno a la doble dieta que él y sus tres compañeros de partido vienen recibiendo de Caja Navarra por dos órganos meramente informativos, sin poder de decisión, y uno de los cuales era desconocido para la opinión púbica como para buena parte de la clase política hasta el pasado domingo.

El propio Miranda admitió una retribución de 1.700 euros por reunión, tanto en la Junta de Entidades Fundadoras como en su Comisión Permanente, que se reúne con más asiduidad que la anterior y a la que sólo están invitados sus cuatro selectos miembros. Datos que extrapolados a la presidenta del Gobierno, presidenta desde julio tanto de la Junta de Fundadores como de la Permanente, que percibe 2.600 euros por reunión, pueden reportar a Barcina cerca de 100.000 euros anuales, cantidad que en cualquier caso la presidenta no ha confirmado todavía.

Se trata en cualquier caso de unas retribuciones muy alejadas de los ingresos del ciudadano medio, que han causado gran sorpresa, y que Miranda quiso defender ayer, alegando que forman parte de la retribución de los miembros del Ejecutivo navarro.

"Cuando se es miembro del Gobierno se sabe que hay un sueldo que viene del Presupuesto y otra parte que viene de las dietas de Caja Navarra y sociedades públicas. Ni nos lo hemos inventado ni es un extra. Siempre ha sido así", recordó Miranda, que se mostró dispuesto abrir un debate público sobre las retribuciones de los altos cargos del Gobierno para fijar un único salario pero apropiado a la responsabilidad del cargo. "Parece que estamos haciendo algo poco menos que delictivo, y siempre hemos cobrado así", defendió Miranda, que recordó, no sin cierto cinismo, que a él, como al resto de funcionarios, también le recortaron el salario, aunque sólo de la parte oficial.