Madrid. El coordinador económico del PP, Cristóbal Montoro, aseguró ayer que, de ganar las próximas elecciones generales, su formación impulsará "en el menor tiempo posible" una segunda ronda de fusiones bancarias, porque el sector tiene "demasiado tamaño que no se justifica", así como un saneamiento de los balances de las entidades para dar salida a los "activos inmobilarios", todo ello en sintonía con las medidas planteadas para Europa en la cumbre bilateral entre Alemania y Francia de este domingo. "Hay que subirse al tren europeo", sentenció Montoro. El riesgo a evitar es, según el dirigente popular, que la economía española siga "paralizada" en una crisis que podría prolongarse "ad eternum" ante la sequía del crédito. "No hay que socializar pérdidas, pero hay que apoyar al sector porque si no nos quedaríamos sin la sangre que fluye en nuestros cuerpos", resumió el dirigente popular.
Por su parte, el candidato socialista a la Presidencia del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, apostó por "echar una mano" a la banca si lo necesita, pero no "a fondo perdido" porque, según dijo, no se pueden "poner en riesgo" los ahorros de los ciudadanos.
Rubalcaba reconoció que es verdad que ha habido bancos que se han comportado "de forma absolutamente irresponsable" y que se están viendo "escándalos intolerables", pero los gobiernos tienen dos opciones: "O dejar caer el sistema financiero o echarle una mano. Creo que hay que echarle una mano, pero no gastar dinero a fondo perdido, sino prestar dinero".
exculpa a blanco Por otra parte, el candidato socialista aseguró que las acusaciones realizadas por un empresario gallego contra el ministro de Fomento y portavoz del Gobierno, José Blanco, de haber cobrado 400.000 euros en comisiones ilegales, son "calumnias electorales" que desaparecerán tras las elecciones generales del 20 de noviembre.
