madrid. El ministro de Fomento y portavoz del Gobierno, José Blanco, aseguró ayer que las informaciones que le relacionan con la denominada operación Campeón son "una falsedad absoluta". "Sé que me tienen muchas ganas, pero no hay caso. No lo hay ni lo habrá", recalcó.

Blanco se expresó así tras el Consejo de Ministros cuando hizo hincapié en que ha iniciado acciones legales para que recaiga "todo el peso de la ley" sobre quien le ha "calumniado gravemente".

El portavoz del Ejecutivo añadió que las acciones judiciales que ha emprendido después de que el empresario farmacéutico lucense José Dorribo le acusara de haber cobrado comisiones por gestionar ayudas y subvenciones para sus empresas tienen dos objetivos: defender su "honor personal" y que los ciudadanos tienen el derecho y él el deber de que se conozca la verdad sobre este asunto.

Blanco destacó que la "primera demostración de que nos encontramos ante una falsedad" es que las empresas de las que se habla en la operación Campeón no recibieron "ninguna ayuda por parte del Gobierno de España".

Por otro lado, el abogado de Dorribo, Ignacio Peláez, aseguró que su cliente le confirmó que "va a tener la capacidad de poder acreditar" que lo dicho sobre Blanco, a quien acusó de haber cobrado comisiones ilegales, "es verdad". En este sentido, Peláez aseveró, en declaraciones a Onda Cero, que su cliente "está deseando" que el también portavoz del Gobierno interponga contra él una querella por calumnias, tal y como anunció, porque ello le daría el derecho de "acreditar y demostrar que lo que dice es verdad".

Blanco, preguntado por estas palabras, dijo que no iba a "comentar declaraciones de ningún abogado que tiene que defender a su cliente".

Desde el PP, el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijoo, pidió a Blanco que "no se resguarde detrás de los escudos políticos y no busque disculpas en lo que han hecho los demás" y le recordó que el diputado del PP que presuntamente fue mencionado por Dorribo dimitió en tres o cuatro horas.

Por último, el portavoz nacional del BNG, Guillerme Vázquez, dio por "zanjado el tema", después de la renuncia de Fernando Blanco de sus cargos políticos en el Parlamento y como candidato al Senado.