La Habana. El Gobierno cubano ha autorizado oficialmente la compraventa de todo tipo de automóviles entre particulares residentes en la isla tras décadas de prohibición y restricciones en esas transacciones, según un decreto publicado por la Gaceta Oficial de la isla.

La medida fue anunciada en abril pasado por el presidente Raúl Castro durante el VI Congreso del Partido Comunista y en julio los medios oficiales publicaron un adelanto de la nueva política.

Según el decreto, firmado por el presidente Raúl Castro y el ministro de Transporte César Ignacio Arocha y que entrará en vigor a partir del 1 de octubre, se permite la donación y compraventa de automóviles entre cubanos y extranjeros residentes en el país y flexibiliza los traspasos de propiedad para quienes abandonen la isla con carácter definitivo.

El valor de los vehículos será fijado en pesos cubanos y las transacciones se harán ante un notario de la isla, donde hasta ahora las leyes cubanas solo permitían traspasar aquellos fabricados antes de 1959.

En cuanto a la posibilidad de comprar vehículos nuevos en concesionarios de la isla, se elimina la restricción de que los cubanos autorizados a esa adquisición tengan que donar al Estado o "dar de baja" su vehículo anterior. La autorización de compra podrá ser otorgada una vez cada cinco años por el Ministerio de Transporte.