hernani. Estamos viviendo unas fiestas sin grandes sobresaltos. ¿Van a llevar sus reivindicaciones a la Aste Nagusia bilbaína?

Lo que estamos viendo, y más este verano, es que por parte de las instituciones ha habido un acercamiento y un querer comprender y ayudar a la situación que viven los presos. Creo que la sociedad vasca cogió hace tiempo el relevo de Etxerat, que era reivindicar e informar. Es la misma sociedad vasca la que quiere reivindicar que esos derechos que se están vulnerando constantemente sean respetados.

¿Con sus reivindicaciones no están patrimonializando las fiestas? Algunos les acusan de ello.

Esta es una acusación que pretende desvirtuar nuestras reivindicaciones. Cómo no se puede entender, cuando día tras día hay unas vulneraciones, cuando hay personas que el día de mañana pueden morir en la cárcel o familiares que pueden morir en la carretera... La gente debería entender que ante esta situación insostenible hay que hacer un esfuerzo y, por encima de todo, hay que hacer alusión a estos derechos para que la sociedad vasca sea consciente de lo que pasa y para que sea la misma sociedad la que cambie esta situación y la que genere la verdadera presión sobre los Estados.

¿Y no importa que sea en las fiestas? ¿No pueden correr peligro de politizarse demasiado?

Esas lecturas son muy interesadas, porque aquí nadie ha hablado de politizar las fiestas. Nosotros sí podemos hablar de que vamos a reivindicar los derechos de nuestros familiares y tenemos todo el derecho, como asociación y como personas, de reivindicar los derechos vulnerados de nuestros familiares, si queremos cada minuto o cada hora. Creo que nadie es quién para criticar o para decir que se están intentando politizar las fiestas. Son palabras que solamente tienen la intención de desvirtuar y de criminalizar una solidaridad humana y natural.

¿Sigue la presión del Departamento de Interior y su política de 'tolerancia cero'? El pasado miércoles la Ertzaintza impidió un homenaje a tres miembros de ETA fallecidos en Morlans en 1991.

Interior sigue con esa política de tolerancia cero, pero también sabemos que lo que sucedió el verano pasado, con todas las identificaciones y criminalización que padeció un movimiento popular que está reclamando derechos fundamentales, a día de hoy, Interior ha visto que con esas actuaciones se ha generado más solidaridad. Este verano se ha dado un paso más en la reivindicación. Y ante criminalizaciones e ilegalizaciones, solamente va a haber más solidaridad.