vitoria. El ámbito municipal será el primer escenario donde Aralar y la otra sensibilidad de la izquierda abertzale podrán comprobar el margen de colaboración que son capaces de trenzar, aunque la relación pasará por el filtro de los otros componentes de Bildu, EA y Alternatiba. El apoyo recíproco de los candidatos de ambas ofertas electorales fue una constante durante las constitución de los nuevos ayuntamientos, y un sinfín de municipios -Zalla, Markina, Zarautz, Zumaia, Durango,...- así lo demuestra.
Como subrayó recientemente la portavoz de Aralar en la Cámara vasca, Aintzane Ezenarro, "lo que nos toca hacer en los pueblos es desterrar definitivamente actitudes que en el pasado han sido demasiado habituales" frente a quien piensa diferente. "Hemos suscrito que si algo así pasara vamos a romper el silencio de forma conjunta y lo vamos a denunciar, y esto me parece muy importante", subrayó desde los micrófonos de Onda Vasca apuntando las lineas rojas que Aralar debe ver respetadas para seguir avanzando en esta colaboración.
Cuando se ponga en marcha, podrá comprobar si los recelos mutuos que han hecho imposible un proyecto compartido de cara a estas últimas elecciones son cosa del pasado y se puede mirar hacia el futuro, donde asoman ya unas elecciones generales que dentro de un año volverán a poner a ambas sensibilidades frente a sus coincidencias y sus discrepancias. De acudir a ellas unidas para defender en Madrid un programa compartido basado en el derecho de autodeterminación y un fuerte contenido de izquierdas, marcarían a buen seguro un espacio propio respecto a PSE y a PNV que les podría catapultar de cara a las próximas autonómicas, previstas para dentro de apenas dos años.
la incógnita de gipuzkoa Pero antes de que la realidad confirme o desmonte estas hipótesis, ambas almas se verán reflejadas en el espejo guipuzcoano, donde si bien comenzaron los contactos para formar gobierno con "buenas sintonías", los últimos pasos de Bildu hacen pensar que sus llamadas a la colaboración amplia se pueden quedar en brindis retóricos. Y es que, si bien en un principio Martin Garitano ofreció a la delegación de Aralar "participar en la gobernación" del territorio, esta misma semana matizaba que buscará "apoyos preferenciales" con el PNV y que la oferta a Aralar no implica necesariamente su participación directa en el Ejecutivo foral.
Mientras, en Navarra, Bildu y NaBai ensayan una oposición conjunta a un bloque UPN-PSN a la que se sumará a menudo I-E. "Nuestra disposición a colaborar es evidente. Pensamos que será muy fácil llegar a acuerdos entre estas tres fuerzas", decía la parlamentaria de Bildu Bakartxo Ruiz refiriéndose a la colaboración que entablarán Nafarroa Bai, Bildu y Izquierda-Ezkerra desde la oposición. "Habrá un nivel de concordancia muy alto", confirmaba el líder de Aralar, Patxi Zabaleta.
Campos de prueba todos para adivinar la posible colaboración futura.
