Londres. La OTAN investiga la presunta muerte de una quincena de rebeldes libios a causa de un bombardeo de la coalición internacional en la ciudad de Brega.
De momento la OTAN prefiere entender estas muertes como víctimas civiles y se apuntó la posibilidad de que las fuerzas aéreas de la coalición hubieran actuado en defensa a un presunto ataque.
La OTAN se toma muy en serio cualquier tipo de información sobre víctimas civiles, pero es muy difícil verificarla porque no tenemos fuentes fiables sobre el terreno", declaró la portavoz de la Alianza Atlántica, Oana Lungescu, en comentarios recogidos por la CNN.
La aviación aliada bombardeó un convoy de milicianos rebeldes que viajaba entre Brega y Ajdabiya durante la noche del viernes. El ataque sería en respuesta a los disparos de un cañón antiaéreo realizados desde un grupo de cinco vehículos rebeldes, según un corresponsal de la BBC en la zona.
Sin embargo, los rebeldes sostienen que fueron combatientes leales a Gadafi quienes se infiltraron en las filas rebeldes para abrir fuego antiaéreo y provocar la represalia de la aviación de la coalición.
"Fuerzas de Gadafi se escabulleron entre los rebeldes y dispararon armas antiaéreas al aire", señaló Mustafa Alí Omar. "Después llegaron las fuerzas de la OTAN y les bombardearon", dijo.
La cadena Al Yazira informó de que el ataque se saldó con cuatro vehículos calcinados que se encuentran aún a las afueras de Brega.
