vitoria. A falta de casi dos meses para las elecciones del 22 de mayo, la maquinaria del PNV presentó ayer en Vitoria sus tres candidaturas a diputado general en el edificio de La Azucarera. Xabier Agirre, José Luis Bilbao y Markel Olano desplegaron su discurso más electoral para demostrar la necesidad del "cambio" que necesita Euskadi tras dos años "perdidos" bajo el gobierno de Patxi López.
El primero en salir a escena fue el anfitrión, Agirre, quien centró su discurso en las prioridades que necesita Álava: el paro y la normalización política. Defendió al mismo tiempo "la transparencia y la ética" tras una legislatura que calificó de "dura" por el presunto caso Miñano, en el que están imputados una quincena de ex dirigentes y militantes jeltzales, el caso Zambrana o la desestabilización de su propio partido en la Diputación el tras las espantadas de sus socios de Gobierno, EA y Aralar. "Están siendo meses muy duros, pero lejos de hundirnos, nos han fortalecido y tenemos ahora mismo una ilusión creciente", espetó a los presentes.
A continuación repasó los tres ejes estratégicos marcados al comienzo de mandato, para concluir que la "foto actual es mucho mejor que la que nos encontramos al llegar", añadió. Y avaló esta afirmación con datos. Sólo la "mala" gestión del PP en proyectos como la Balsa del Noryeste y la AP-1 "nos van a costar a los alaveses cien millones de euros", cuantificó. Por último, enumeró Agirre sus preocupaciones para la legislatura que viene: paro, crisis económica, relación entre la ciudadanía y la clase política y normalización del país ahora que se abre una nueva oportunidad con Sortu, ante la que pidió que "no se le pongan palos en las ruedas", dijo. "Lo hemos hecho bien pero no podemos dormirnos ni caer en la autocomplacencia", concluyó.
Bilbao y Olano Su colega Bilbao destacó, por su parte, el "saber hacer" del PNV en la gestión de las instituciones vascas, algo que "ha cambiado" tras la llegada del PSE al Gobierno. Según advirtió, el partido de Patxi López y los populares vascos "pretenden homologarnos al resto del Estado, tanto en lo simbólico e identitario, como en lo económico, creándonos más déficit e ineficacia ", advirtió. Ante un escenario futuro similar al actual y ante la posibilidad de que PSE y PP amplíen su control a diputaciones y ayuntamientos, ofreció Bilbao a su formación como "la garantía del pan para hoy, pero también para mañana".
El último en hablar fue el candidato a la Diputación de Gipuzkoa, Markel Olano, quien centró su discurso en la necesidad de crear "un espacio de trabajo en común" entre todas las fuerzas nacionalistas como "alternativa" al "frente constitucionalista" del PSE y el PP, que pretende, insistió Olano, extender su pacto a ayuntamientos y diputaciones "si les dan los números" como consecuencia de "nuestra debilidad", avisó. También defendió el jeltzale el derecho de los vascos "a decidir su propio futuro", una reivindicación de la que afirmó que "ha venido para quedarse".