el cairo. Los egipcios acudieron ayer masivamente a las urnas para votar en un referéndum para la enmienda de la Constitución del país, un vestigio del régimen del ex presidente Hosni Mubarak. Las modificaciones que se pretenden introducir en la Carta Magna estipulan que un candidato presidencial debe tener el respaldo de al menos 30 diputados y de 30.000 ciudadanos de quince gobernaciones, con al menos mil de cada una de ellas. Asimismo, se estipula que el presidente sólo podrá estar en el poder durante dos mandatos sucesivos , que debe designar un vicepresidente y que, aunque puede aprobar el estado de emergencia, deberá someter la decisión a un referéndum nacional.
Estos cambios no cuentan con el apoyo de todos los grupos políticos, en particular aquellos que estuvieron detrás de las manifestaciones de Tahrir. Tanto el líder opositor y Nobel de la Paz Mohamed ElBaradei como el secretario general de la Liga Arabe, Amr Musa, ambos candidatos a la presidencia, han mostrado su rechazo a las enmiendas. "Mantener la Constitución de Mubarak, aunque sea temporalmente, es un insulto para la revolución", subrayó ElBaradei.
Frente a ellos, los remanentes del partido de Mubarak (PND) y los Hermanos Musulmanes que mantienen que "no es el momento para entrar en esta polarización política".
Por el momento no está claro cuál puede ser el resultado, después de que un sondeo realizado la semana pasada apuntara que el 59% de los egipcios rechazan las enmiendas.