JAVIER ENCINAS
PAMPLONA. Nafarroa Bai dio ayer el pistoletazo de salida hacia la carrera electoral que concluirá el 22 de mayo con un discurso en el que no faltó la autocrítica. Respaldados por más de 40 cargos públicos y candidatos de la coalición, Patxi Zabaleta y Uxue Barkos -los aspirantes a dirigir las principales instituciones de la Comunidad Foral- dieron por "superado el desgaste interno" que ha supuesto la marcha de EA y Batzarre y postularon a la coalición como la "oferta del cambio".
"Una vez superado el desgaste y hecha la autocrítica de todo lo que nosotros hayamos podido ofrecer como imagen ante la sociedad, nos presentamos con nuevos bríos, abiertos siempre al diálogo, a la comunicación y a aceptar lo que desde la sociedad se nos diga", proclamó Zabaleta, que se comprometió a trabajar "con la ilusión de hacer una oferta por la Navarra de todos, donde esté erradicado el clientelismo, el amiguismo y la parcialidad". "Una Navarra -continuó el cabeza de lista al Parlamento foral- en la que pretendemos servir desde la coherencia, desde la sinceridad, y con el objetivo y el interés de aglutinar a todas las personas, todas las fuerzas y también a todos los agentes políticos que estén por cambiar esta situación".
"Hay que darle una nueva oportunidad al cambio", prosiguió en su breve pero precisa intervención, "una nueva oportunidad a la modificación de la sociedad que los navarros saben que se necesita, que quieren hacerlo y les tenemos que ofrecer el camino para hacerlo".
Zabaleta reiteró que "el adversario político es UPN y quienes le ayuden a hacer sus políticas" y expresó su convencimiento de que el ciclo de la formación regionalista "está agotado".
