vitoria. Para algunas asociaciones de víctimas del terrorismo, el "nuevo tiempo" que ya admiten ver abrirse en el horizonte la mayoría de los dirigentes políticos del Estado viene preñado de riesgos: los dos principales, que las decisiones relativas a la presencia de la izquierda abertzale ilegalizada y a la reinserción de los presos del MLNV se tomen a pesar de su oposición frontal.
Consideran "ofensiva y grave" la "complacencia" e incluso "euforia y esperanza" con la que, a su juicio, algunos dirigentes políticos de los grandes partidos han saludado la "última trampa electoral" que insisten en atribuir a ETA y ante la posibilidad de que esto se traduzca en la presencia por una u otra vía de este sector en las instituciones vascas, o de que se refleje en el impulso de lo que denominan "apaños penitenciarios", ayer convocaron una nueva marcha que recorrerá las calles de Madrid el próximo 9 de abril.
Con ella, la AVT, Dignidad y Justicia, la Fundación Miguel Ángel Blanco, la Asociación de Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado Víctimas del Terrorismo, entre otras, exigirán al Gobierno que no permita que este sector se presente a las elecciones "bajo cualquier subterfugio o disfraz" y que actúe con "menos retórica y más claridad; con menos cálculo y más determinación".