GASTEIZ. Ésta es una de las conclusiones de la encuesta sobre Cultura Democrática hecha por la Presidencia del Gobierno vasco entre finales de octubre y mediados de noviembre.

Otro de los datos significativos plasmados en la encuesta es que hoy los vascos que apoyarían en referéndum la Constitución española casi duplicarían a los que lo hicieron en 1978, unos 800.000 frente a 480.000.

A la pregunta sobre si se siente libre para hablar de política, el 42 por ciento dice que sí con todo el mundo, el 41 por ciento sólo con ciertas personas y el 14 por ciento con casi nadie.

Hace dos años los vascos que se sentían libres para hablar de política sin reparos eran el 26 por ciento, mientras que los que no hablaban con casi nadie llegaban al 22 por ciento.

El porcentaje de personas que hablan con todo el mundo de política es el más alto desde 1988, a excepción del año 1998, en el que estaba vigente una tregua de ETA.

El responsable de estudios sociológicos del Gobierno vasco, Víctor Urrutia, ha destacado que pese a esta evolución sólo 4 de cada 10 personas consultadas afirman sentirse libres para hablar de política con todo el mundo, algo que puede deberse al efecto de la privacidad de la política y al impacto del terrorismo.

La encuesta también constata que si hoy se volviera a celebrar el referéndum constitucional, el 46 por ciento votaría afirmativamente, frente a un 14 por ciento que lo haría en contra.

En términos absolutos optarían por el sí más de 800.000 electores (en 1978 fueron algo menos que 480.000) y por el no casi 250.000 (163.000 en 1978).

En relación con el Estatuto de Autonomía, si ahora se celebrase el referéndum el 44 por ciento votaría a favor (53% en 1979) y el 12 por ciento en contra (3% en el 79).

Urrutia ha explicado que sobre el nivel de autogobierno, las opciones estatutarias duplican, con el 44 por ciento de apoyo, a las independentistas, defendidas por el 21 por ciento de los encuestados.

Sobre la política en general, al 53 por ciento de los vascos le inspira desconfianza, al 33 por ciento aburrimiento y al 31 por ciento indiferencia. Sólo el 13 por ciento se siente comprometido y al 3 por ciento le produce entusiasmo.

Estos porcentajes superan el cien por ciento porque los encuestados podían dar dos respuestas.

El 73 por ciento de los vascos se muestran de acuerdo con la expresión de que esté quien esté en el poder siempre busca sus intereses personales y el 77 por ciento afirma que la democracia es el sistema preferible a cualquier otra forma de gobierno.

En cuanto a la ubicación en el espectro político, el 26 por ciento se manifiesta nacionalista o abertzale, el 21 por ciento apolítico y el 17 por ciento socialista.

El 90 por ciento de los encuestados nunca ha pertenecido a ningún partido político, el 75 por ciento a ningún sindicato y el 89 por ciento a ningún colegio profesional. El 83 por ciento también dice que nunca ha pertenecido a una parroquia u otro tipo de organización o asociación religiosa.

El trabajo recoge que para los vascos los bancos son los organismos que más poder tienen en el País Vasco y en España, seguidos de las grandes empresas y de los gobiernos vasco y español, respectivamente.