Vitoria. De trece personas citadas durante el último mes por la Cámara Vasca para declarar sobre el caso Miñano, apenas un par han respondido a las preguntas de los parlamentarios. Por ello, y pese a que ayer tocaba dar por concluido el bloque sobre los contratos adjudicados por el Departamento de Cultura del Gobierno Vasco y sobre el presunto espionaje, y hacer balance, la Comisión de investigación decidió dar un plazo de una semana a los grupos para proponer nuevas comparecencias y recabar más documentación.

Así lo explicó su presidente, Juanjo Agirrezabala, quien pese a reconocer que la información recabada por los grupos "no es la deseada", afirmó que la valoración "en general" del desarrollo de la Comisión durante este mes es "positiva".

Los grupos tienen hasta el martes 1 de febrero para solicitar nuevas comparecencias y documentación, y un día más tarde se elaborará un nuevo calendario para cerrar definitivamente la investigación sobre las presuntas responsabilidades políticas que puedan haberse producido en los departamentos de Cultura e Interior.

Las reuniones se celebrarán todos los martes -los lunes si la semana anterior hubo Pleno de control- y obligarán a retrasar el abordaje del resto de la investigación parlamentaria, la que hace referencia expresa al Parque de Miñano. Por ello, Agirrezabala explicó que, de prolongarse los trabajos de la Comisión hasta mayo, estos se suspenderán mientras dure la campaña electoral, un periodo en el que todo el Parlamento paralizará su actividad.

Agirrezabala explicó además que los miembros de la Comisión se ratificaron ayer en su compromiso de no filtrar más información sobre el contenido de sus reuniones, y por ello pidió a Aralar que regrese a este foro, que abandonó en protesta por la violación del secreto decretado sobre los trabajos. El parlamentario de la formación abertzale, Mikel Basabe, afirmó no tener inconveniente en regresar si efectivamente se garantiza la estanquidad de la Comisión.

El PNV volvió ayer a denunciar esas filtraciones antes de acceder a la Comisión, mediante un texto en el que señalaba las ideas principales que iba a exponer en este primer balance de la investigación parlamentaria sobre el caso Miñano, que ahora cuenta con un nuevo imputado, el exconcejal del PNV en Leioa y administrador de Errexal, Iñaki San Juan. Según los jeltzales, se está haciendo un "uso partidista" de la Comisión, como a su juicio prueba el hecho de que "hayan esperado nueve meses para constituirla, en vísperas de unas elecciones".

Los nacionalistas, para quienes "algunos grupos tienen ya redactadas las conclusiones" sobre las responsabilidades políticas de la presunta trama de corrupción, se preguntaban ayer "cómo van a justificar ahora más solicitudes de comparecencia", cuando en su día sólo se admitieron 33 de las 74 pedidas por los partidos políticos. El PNV recordó además que todas las personas citadas han terminado por comparecer, excepto Araceli Bajo, que no acudió por encontrarse de baja médica.

alberdi rompe su silencio Por otra parte, la abogada Ainhoa Alberdi, que desató la investigación judicial al denunciar el presunto chantaje al que fue sometida por Aitor Telleria y Alfredo De Miguel, anunció ayer que hará valer sus derechos ante la publicación de una fotografía suya en un medio de comunicación.