Donostia. "Final del final" de la violencia de ETA frente al "principio del fin". La izquierda abertzale y el Gobierno español coinciden al situar en su "final" la etapa de violencia en Euskadi. El matiz reside en qué punto del "final" se halla el proceso. El cruce de declaraciones entre los agentes políticos siguió un día después del comunicado de ETA en el que declaraba un "alto el fuego permanente, de carácter general y que puede ser verificado por la comunidad internacional".

La atención volvía a estar centrada en dos puntos: en la izquierda abertzale y en el propio Gobierno español. Más después de que la situación volviera a variar tras las detenciones de dos presuntos miembros del aparato logístico de ETA en la madrugada de ayer.

Uno de los primeros en intervenir fue el representante de la izquierda abertzale, Txelui Moreno. En una entrevista en el programa El matí de Catalunya Ràdio, Moreno ahondó en lo que habían explicado pocas horas antes en Donostia.

Para la izquierda abertzale, la declaración que ETA dio a conocer el lunes tendrá continuidad con nuevas notificaciones. Moreno no cree que fuera el último comunicado ya que "como parte implicada en lo que ha sido la confrontación de nuestro país, tendrá que decir más cosas y las dirá".

No se aventuró a señalar en "qué sentido" volverá a hablar la organización armada, "pero seguramente en el sentido positivo de apoyar el proceso democrático y marcar la irreversibilidad de su decisión".

Moreno volvió a insistir en la importancia del comunicado: "Es importante e histórico, e intentar ocultarlo por intereses partidistas hace flaco favor a la resolución del conflicto".

Estrategia contra estrategia Cuestionado por qué el comunicado es "histórico", el portavoz de la izquierda abertzale justificó el término en que "ETA ha tomado una determinación importante unilateralmente de no solamente paralizar o no hacer acciones armadas, sino de dar un impulso al proceso democrático".

Moreno recordó que, con "la estrategia que ha diseñado la izquierda abertzale este último año", han conseguido "romper la estrategia del Estado para copar las instituciones vascas". Tanto es así que "al Gobierno español -prosiguió Txelui Moreno- no le interesa" la vía que "ha adoptado la izquierda abertzale" porque quiebra sus posiciones "y va a hacer todo lo que esté en su mano para que se rompa".

El portavoz de este sector político se mostró rotundo ante cualquier posible fracaso: "Esto es irreversible, la decisión está tomada. ETA lo ha dejado bien claro: aquí, ahora, lo único que queda es que una parte que practicaba la violencia ha hecho caso al emplazamiento de los agentes sociales e internacionales y el Gobierno español todavía no ha hecho caso".

El director del programa matinal, Manel Fuentes, le cuestionó si, con esa "estrategia", no sería "mucho más fácil si ETA hubiera salido y hubiera dicho: "Señores, aquí están las armas y no las vamos a volver a coger"". "Eso es soñar -respondió Moreno-. Todo tiene un proceso. Una lucha armada de cincuenta años de clandestinidad, de lucha armada, de confrontación armada con un gobierno, no se hace de la noche a la mañana, como usted podrá cerciorarse". Y profundizó: "Es el lógico paso y que en todos los sitios se ha dado. No se puede acabar de la noche a la mañana con un enfrentamiento de cincuenta años".

Para concluir la entrevista, Fuentes le planteó dos preguntas directas a Txelui Moreno: "¿Se ha acabado la violencia de ETA". "Sí", respondió Moreno. "¿Para siempre?": "Yo creo que sí".

"Principio del fin" Poco tiempo después de la entrevista de Moreno, el vicepresidente primero y ministro del Interior español, Alfredo Pérez Rubalcaba, coincidía con la izquierda abertzale -"un mundo en convulsión"- y con otros muchos sectores sociales: "Cincuenta años matando no se cierran en una tarde".

El día siguiente de que afirmara que el comunicado de ETA era "una buena noticia" pero que no era "la noticia", Rubalcaba intentó ahondar en el discurso de prudencia: "Estamos viendo el principio del fin. No digo que mañana o pasado; no hay que hacerse ilusiones, porque 50 años matando no se cierran en una tarde. Tardará, pero estamos recorriendo los últimos momentos".

El vicepresidente español valoró los "esfuerzos de Batasuna" en su entrevista en Cuatro. De esta manera, dijo que rechazar que "Batasuna está haciendo esfuerzos sería negar la verdad", pero "tiene que hacer el máximo, que es romper con ETA o convencerla de que lo deje del todo".

Rubalcaba echó mano de la literatura y calificó la situación de la izquierda abertzale ante las elecciones como la de "quien tiene que atravesar un río. Tiene que llegar a la orilla y la orilla no se va a mover, tiene que pasar el río entero. ¿Está usted remando? Sí. ¿Rema a suficiente velocidad? No. ¿Está usted lejos? Todavía está lejos".

El vicepresidente español y ministro del Interior, que fijó en la Guardia Civil y la Policía la razón de por qué "ETA no actúa", hizo referencia en la entrevista a que "la resolución final" del "problema que sufrimos todos" será "allí", en alusión a Euskadi.

Rubalcaba volvió a emplazar a ETA a que cambie sus tres siglas por las de "F-I-N". Final que, según él, está "más cerca, pero falta mucho".