vitoria. La crisis preocupa cada vez más a los vascos, la violencia que se puede generar en torno al fenómeno del terrorismo, cada vez menos.
Los resultados del Sociómetro vienen registrando en los últimos años una pauta sostenida respecto a esta cuestión que los resultados de esta última oleada confirman, ya sea por el descenso notable de la actividad violenta de una ETA que llegó a rondar el centenar de asesinatos al año en los años de plomo, o bien porque los efectos de la crisis perturban más directamente a los vascos en su día a día.
En 2004, la violencia y el terrorismo se situaban como una de las tres máximas preocupaciones, siéndolo para un 55% de los vascos. Al calor del proceso de Loiola que ETA dinamitó en la T-4, este porcentaje descendió hasta el 36% dejando paso a los primeros efectos de la crisis relativos a asuntos como el paro o la vivienda, que se colocaron en cabeza de las preocupaciones para no abandonarla hasta hoy en día.
Después del atentado de Barajas, esta cuestión se volvió a abrir paso en la lista de principales problemas elaborada en 2007, cuando era una de las tres máximas preocupaciones del 45% de los ciudadanos. Sin embargo, desde entonces se ha venido desinflando hasta que en esta oleada ha registrado su mayor desplome.
Actualmente, la violencia y el terrorismo son sólo una de las tres mayores preocupaciones para un 19% de los vascos, mientras que parámetros como el paro lo son para un rotundo 70% de los ciudadanos encuestados.
De forma paralela, también la preocupación por la situación política del País Vasco ha sufrido un progresivo retroceso. Ya es una de las tres principales preocupaciones sólo para el 19% de los vascos, lo que supone un descenso de seis puntos respecto al sociómetro de mayo.
la mayoría apolítica A la hora de definirse políticamente, los encuestados han optado mayoritariamente por la opción "apolítico", huyendo así de encasillarse en los parámetros que presentaba la encuesta, como "nacionalista", "liberal", "socialista", "demócrata cristiano" o "conservador". Estos datos chocan con los recogidos por el Barómetro en España, donde muy poca gente se declara "apolítica", optando la mayoría por las casillas "liberal", "conservador" o "socialdemócrata".
Sin embargo, si la neutra, es la opción elegida por la mayoría de los ciudadanos vascos, la que le sigue de cerca -y duplicando el apoyo de la opción "socialista"- es la "nacionalista". No en vano, los encuestados se escoran ligeramente hacia el sentimiento abertzale y hacia los parámetros de izquierda a la hora de definir su "escala de nacionalismo" y su "escala derecha-izquierda" respectivamente.