VITORIA. Es vicepresidente de la recientemente constituida Comisión de investigación del caso De Miguel y anda estos días, en su calidad de secretario general del grupo socialista en el Parlamento Vasco, especialmente implicado en el trámite de los Presupuestos vascos. Todo en plena escalada dialéctica entre PSE y PNV, con reproche mutuo por "gravísimas descalificaciones". Una situación que confiesa que no le agrada y respecto a la que recuerda precedentes de la anterior legislatura en los que los agravios partieron de su partido hacia el lehendakari Ibarretxe y que, subraya, no hizo sino perjudicar a los socialistas.
Inicia la andadura de la Comisión de investigación del "caso De Miguel". El PNV se muestra receloso, aprecian tintes preelectorales y piden garantías ante eventuales filtraciones de los trabajos. ¿Pueden tranquilizarles al respecto?
Entiendo que estén nerviosos porque todos los presuntos implicados en la trama de corrupción y espionaje o son del PNV o fueron nombrados por el PNV. No sé como puedo yo calmarles porque creo que no está en mi mano. Dicho eso, no sé qué tintes preelectorales puede tener. Quizás el problema lo estén teniendo ellos. Querían hacer esta comisión, investigar hasta el final, no tenían nada que ocultar. Pero luego en el Parlamento lo que han hecho es no apoyar la comisión; pidieron que se entregaran los carnés a todos los presuntos implicados y tampoco han dado explicaciones a la sociedad de si los han entregado o no. En este asunto el PNV no nos puede dar demasiadas lecciones a los demás. Dicen una cosa y luego hacen otra, primero es blanco, luego es negro y lo que nunca se ponen es coloraos.
Estando el caso aún en fase de instrucción y dada la proximidad de las elecciones forales y municipales, no parece tampoco descabellado pensar que pueda haber cierto interés electoralista en esta comisión...
Una cosa es la investigación parlamentaria y otra la Justicia. Aquí no se va a juzgar a nadie, aquí se van a determinar, si corresponde, las responsabilidades políticas.
Insisto, el caso está en fase de instrucción, personas hoy imputadas podrían dejar de estarlo, por ejemplo. ¿No habría que esperar a que la investigación judicial se aclarara?
Me remito a la Comisión de investigación del caso Balenciaga. Cuando se constituye, el Legislativo envía una carta al Judicial y le dice usted márqueme los límites, dígame a quiénes puedo llamar a comparecer y qué información puedo pedir o no. El Poder Judicial dijo oiga, haga lo que tenga que hacer y si ve algún indicio de delito, comuníquemelo. En este caso supongo que se hará lo mismo. No es incompatible, nunca lo ha sido.
Vamos al tema presupuestario, cuyo debate empieza ya en el Parlamento. José Antonio Pastor pedía el martes al PNV que apoyara las Cuentas apelando, entre otras cuestiones, al argumento de la responsabilidad. ¿Cabría hacer la misma apelación al PSE en las diputaciones?
El PSE apoyó los últimos cuatro presupuestos de la legislatura pasada, de Ibarretxe, porque pensábamos que eso era un ejercicio de responsabilidad y lanzar a la sociedad un mensaje de que los grandes partidos nos poníamos de acuerdo para salir de la crisis que, por cierto, el Gobierno anterior no reconocía. El PSE también ha demostrado responsabilidad en un acuerdo que se firmó con el PNV [el año pasado] para facilitar los presupuestos en las principales instituciones. Lo cierto es que el PSE es capaz de apoyar presupuestos, por ejemplo probablemente en la Diputación de Álava, y el PNV no. Ése es todo el ejercicio de patriotismo que hace el PNV. Alguna explicación debieran de dar ellos de, si de verdad su centro de decisión está sólo en Euskadi, por qué son capaces de aprobar unos presupuestos para Murcia y no para Euskadi.
¿En qué punto están las conversaciones con el PNV? ¿Hay margen para lograr un acuerdo que permita ese apoyo que reclaman?
El contacto es permanente en el Parlamento, pero además ha habido contactos por parte del Gobierno Vasco, del consejero de Economía, con los responsables del PNV. La pelota no está en nuestro tejado. Son unos buenos Presupuestos. Son austeros, tienen una gran apuesta por la innovación, con 210 millones de euros para 3I+D, y buscan la cohesión social. Pero todavía serían mejores si además de PSE y PP los apoyara el PNV. Porque diríamos a la sociedad que el 80% de los representantes públicos queremos unos presupuestos y que el país salga adelante. Los presupuestos de Ibarretxe no eran los nuestros, hacíamos nuestras aportaciones. Lo que no puede pretender el primer partido de la oposición es que los presupuestos que hace el Gobierno, que tiene mayoría parlamentaria, sean los del PNV.
Tienen un acuerdo presupuestario previo con el PP, ¿en qué medida limita lel consenso con otros grupos?
El Acuerdo de Bases no tiene ni una línea que excluya a nadie, salvo a quienes no crean en la democracia y la combatan. En el Parlamento Vasco el PSE participa en el 95% de los acuerdos, sólo el 20% de esos acuerdos son en exclusiva con el PP. Creo que no tenemos que demostrar demasiado que tenemos margen de maniobra. El que parece enfrascado en su discurso deslegitimador, rupturista, radical contra este Gobierno es el PNV y lo demuestra todos los días. El concepto que tiene el PNV del abertzalismo es ciertamente curioso: es abertzale en la medida en que gobierna esas instituciones. Al PNV le importa Euskadi si lo gobierna él y, si no, le deja de importar. Sólo voy a poner un ejemplo: un dirigente del PNV confesó que antes pasaban el 90% de las discusiones en el EBB intentando poner de acuerdo a las diputaciones y al Gobierno Vasco y ahora, una vez que han perdido el Gobierno Vasco, pasan el 90% de las discusiones del EBB viendo cómo fastidiar al Gobierno Vasco. Ése es el patriotismo del PNV, defiende las instituciones cuando ellos las gobiernan. Si no las gobiernan no importa atacar a ETB, a Osakidetza y la Lehendakaritza.
Le propongo una hipótesis: el PSE ha endurecido su discurso respecto al PNV para reivindicar su papel al frente del Gobierno Vasco tras el acuerdo PNV-PSOE en torno a los Presupuestos Generales del Estado.
En absoluto. El acuerdo que se produce para los Presupuestos Generales del Estado me parece bueno para España y bueno para Euskadi. Porque da un horizonte de estabilidad al Gobierno de España para toda la legislatura, que recuerdo que es de mi partido así que torpe sería si no quisiera que a Rodríguez Zapatero le fuera bien. Ese acuerdo hace que el Gobierno Vasco y Patxi López vayan a propiciar un gran avance en materia de autogobierno y en transferencias a la CAV y, por tanto, va a contar con más herramientas para luchar contra la crisis; el Gobierno Vasco y el PSE estamos muy satisfechos. Y el PNV también está encantado por lo que se ve. Conclusión, el PNV es muy útil en la oposición.
Parece que el PSE ha ganado peso en el Ejecutivo de Zapatero con Ramón Jáuregui y también Txiki Benegas y Eduardo Madina están presentes en la comisión bilateral PSOE-PNV ¿más garantía de que lo ocurrido con las políticas activas de empleo en 2009 no se repita?
Es que a algunas cosas debiera responder el PNV. El PNV debiera responder por qué no le gusta negociar con dirigentes del PSE que hacen política en Madrid. Ellos debieran explicarlo.
Vuelvo a los Presupuestos vascos. ¿Las enmiendas parciales pactadas con el PP supondrán algún cambio muy reseñable en el proyecto?
El lunes formalizaremos el registro de enmiendas conjuntas, en torno a 170 enmiendas por valor de unos 60 millones de euros, que no son de calibre grueso porque el Presupuesto lo ha hecho el Gobierno Vasco.
¿Qué lectura hace de la ruptura de PNV y EA en la Diputación alavesa?
Es muy sencillo. La fórmula de acumulación de fuerzas nacionalistas no funciona para gestionar las instituciones alavesas, que empezó con tres partidos en el gobierno y acabará con sólo uno.
¿Y a futuro? ¿Lo que está pasando qué tipo de escenario político de eventuales alianzas postelectorales vaticina, cuando estamos a apenas seis meses de las elecicones forales?
Los que están jugando con la institución foral de Álava irresponsablemente son los que tienen que dar explicaciones. Si tienen decidido romper el Gobierno, no creo que sea muy edificante andar jugando con la institución.
Me refiero a que, por un lado, este episodio pueda anticipar que los pactos nacionalistas no vayan a ser en torno al PNV y a la posibilidad de que eso pueda facilitar una mayor colaboración de la que ya se ha dado esta legislatura entre PSE y PNV. ¿O la "extensión del cambio" de la que el otro día hablaba Patxi López sólo contempla la fórmula con el PP?
Obviamente no hay nada decidido, como ha quedado demostrado. Los hechos desmienten todas las profecías apocalípticas que se hicieron. Una de ellas fue que el precio del apoyo del PP a Patxi López era la cabeza del diputado general de Álava.
Hoy hay elecciones en Cataluña. ¿Estaría más tranquilo el PSE si CiU se hiciera con la Generalitat y se convirtiera en un socio potencial de Zapatero alternativo al PNV?
El PSE lo que quiere es que el PSC gane. Pertenecemos al mismo partido pero, al margen de eso, considero que es más solidario y redistribuye mejor los recursos un partido socialista que uno nacionalista.