Vitoria. En contra de lo que el martes manifestaba el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, en Askapena consideran que la operación que se saldó con la detención de siete miembros de esta organización persigue atacar la vertiente internacional del proceso que ha emprendido la izquierda abertzale de la mano de EA o Aralar. "La implicación y solidaridad existentes a nivel internacional para la consecución de una solución democrática se ha convertido en un problema para el Estado español y quiere detenerlo", afirmaron ayer portavoces de Askapena en una rueda de prensa convocada en el centro de Vitoria.

Así, los simpatizantes de la organización consideran que las siete detenciones traen consigo un mensaje implícito, habida cuenta de que la antigua Batasuna ha intentado blindar y legitimar su apuesta por las vías políticas con el aval de los mediadores internacionales y las personalidades del ámbito exterior cuya implicación ha logrado recabar.

"El Estado español, en lugar de ofrecer una salida política y democrática, utiliza únicamente medios represivos y está intentando sabotear el camino abierto", insistieron los portavoces de los simpatizantes de Askapena reunidos en la Plaza de los Fueros de Gasteiz, que enmarcan la operación en "una campaña de criminalización" del trabajo de acumulación de fuerzas emprendido.

En su alocución ante los medios, Jon Etxebarria y Naiara Bernal reclamaron además el fin de la incomunicación y la puesta en libertad de los siete detenidos "ante el riesgo de torturas y malos tratos".

Los representantes de Askapena pidieron a la población vasca que "tome parte en las protestas contra este golpe represivo" y, en ese sentido, llamaron a la participación en la manifestación convocada para reivindicar los derechos humanos el sábado en Bilbao, y en el Internazionalista Eguna que ya estaba previsto celebrar en Gernika el 16 de octubre. Asimismo, se realizó un "llamamiento internacional para que se denuncie tanto este nuevo ataque como la sistemática conculcación de derechos que padecemos en Euskal Herria".

En ese sentido, los simpatizantes de Askapena aseguraron haber recibido "mensajes de apoyo y adhesiones de otros pueblos en lucha", como Argentina, Venezuela, México, Palestina, Irlanda, Italia, Portugal o Escocia.