VITORIA. El derecho de manifestación está por encima de cualquier discrepancia. Así lo aseguró ayer el presidente del EBB, Iñigo Urkullu, que, en los micrófonos de Radio Euskadi, confirmó que el PNV no acudirá a la manifestación alternativa convocada para esta tarde en Bilbao y que sustituye -si la Audiencia Nacional no dice lo contrario- a la marcha organizada por Adierazi EH, que fue prohibida el pasado jueves.
Ante la nueva convocatoria, el burukide destacó que no están "ni convocados, ni invitados" y que, siguiendo con su costumbre, -salvo cuestiones de relación previa muy claras, matizó-, no participan en manifestaciones convocadas por otros. Pero Urkullu reiteró la defensa del derecho de manifestación.
órdenes del PP Aralar, por su parte, criticó en un comunicado al Departamento de Interior del Gobierno vasco, "con el consejero Ares a la cabeza", porque da muestras de dependencia y está dispuesto a hacer cualquier cosa "con tal de mantenerse en el poder de una manera miserable". Para ello, según indicó la formación de Patxi Zabaleta, obedece las órdenes que le da el Partido Popular.
Después de arremeter contra el Gabinete López por facilitar la documentación necesaria a la Fiscalía de la Audiencia Nacional, Aralar recordó al Ministerio público que su objetivo es que se cumplan los derechos humanos y las libertades de las personas. Algo que para la formación abertzale no se ha cumplido: "Con esta actitud, se mete de lleno en la dinámica de las prohibiciones y actúa a favor de unos determinados intereses partidistas".
En este sentido, tras hacer un llamamiento al Poder Judicial para que garantice "de una vez" las libertades democráticas, desde Aralar reiteraron que en la Europa del siglo XXI los ciudadanos deberían expresar sus opiniones sin problemas: "Pero la democracia del Reino de España no está a ese nivel".