Bilbao. La izquierda abertzale oficial exige su legalización como uno de los pasos mínimos para la consecución de un proceso democrático, y así lo reclamó al Gobierno español. La respuesta del Ejecutivo de Madrid no tardó en llegar y fue el propio presidente español, José Luis Rodríguez Zapatero, quien aseguró que, ante las peticiones de legalización, la izquierda abertzale oficial sólo tiene un camino: la condena de la violencia y el abandono de las armas "para siempre".

Representantes de la izquierda abertzale histórica comparecieron ayer en Bilbao para valorar el comunicado emitido el pasado domingo por ETA. En una multitudinaria rueda de prensa, Marian Beitialarrangoitia -en euskera- y Txelui Moreno -en castellano- aseguraron que el comunicado "se sitúa en la orientación adecuada marcada por la Declaración de Bruselas como referente para abrir un proceso de diálogo y negociación en condiciones de no violencia estable y verificable". Si para este sector político el paso dado "es importantísimo para pasar a una nueva fase política", Txelui Moreno exigió también pasos de los gobiernos español y francés. "Que den pasos, aunque sean insuficientes, como dicen que ha sido el dado por ETA. Aunque sean insuficientes, pero que los den. Ni el PP ni el PSOE han movido un solo dedo. El Gobierno español no ha hecho nada, no se ha movido. Si no es irresponsabilidad, le está costando resituarse ", aseguró.

Y uno de los primeros pasos que exigen del Gobierno de Rodríguez Zapatero es que se proceda a la legalización inmediata de la izquierda abertzale. Moreno lo calificó como el "test democrático" que debe afrontar el Ejecutivo español. "Debe aprobar este test de democracia. Tiene que legalizar a la izquierda abertzale porque es uno de los mínimos democráticos que se tienen que cumplir en este pueblo para realizar el proceso democrático hasta las últimas consecuencias", recalcó.

CONFRONTACIÓN DE IDEAS Según el dirigente abertzale, la confrontación política en igualdad de condiciones es ineludible: "Lo que pedimos es que todas las formaciones políticas tengan las mismas oportunidades, que puedan presentar sus programas y que, después, sea el pueblo quien decida. La izquierda abertzale no tiene miedo a que se dé esa confrontación política".

La respuesta llegó en boca del propio presidente del Ejecutivo español. Zapatero manifestó que "quienes están fuera de la legalidad porque no condenan tajantemente la violencia están en la misma situación hoy que antes del comunicado, exactamente la misma". Para el socialista, ha pasado el tiempo de los comunicados y es hora de tomar decisiones, y la única decisión que aseguró esperar por parte de ETA es el "abandono de las armas para siempre". El líder del PSOE, además, añadió que la izquierda ilegalizada sabe que ésa es la única decisión que esperan los partidos políticos.

Tutela del pueblo En su comparecencia ante la prensa, además de la exigencia de legalización, y entre esos mínimos democráticos a los que aludió, Txelui Moreno se refirió también a la situación de los presos. En este sentido, insistió en la necesidad de que "cese la humillación" a los familiares de los reclusos, y que se produzca la excarcelación de los que se encuentran enfermos, así como el acercamiento de presos. Moreno indicó también que "se están abriendo las puertas de una nueva fase política", y aseguró que no cejarán en sus esfuerzos por conseguirla. "Tenemos la determinación y confianza de llevar este proceso hasta el final. Nadie ni nada nos sacará del carril que conduzca a un escenario de cambio y soluciones políticas", señaló. El representante de la izquierda abertzale llamó a la responsabilidad de los agentes sociales, y aseguró que "debe ser el pueblo quien tutele y sea el garante de todo este proceso". En este sentido, se refirió a la declaración oficial del PNV en la que se pedía a la izquierda ilegalizada que se plantara ante ETA. Moreno aseguró que la sociedad vasca está pidiendo a todos que se muevan, "y los dirigentes jeltzales parece que no lo han entendido".

Por último, la izquierda aber-tzale oficial aseguró que está trabajando junto a EA para elaborar un documento de mínimos democráticos que será presentado en breve, y sobre el que Moreno señaló que se recogen emplazamientos a ETA y al Gobierno español, "porque todos tenemos que hacer movimientos en la buena dirección".

En este sentido, al finalizar la rueda de prensa de la izquierda ilegalizada, y según pudo confirmar este diario, se produjo una reunión en el mismo hotel de Bilbao en la que tomaron parte Rufi Etxeberria, Jone Goirizelaia e Iñaki Olalde, por parte de la izquierda abertzale oficial; el secretario general de EA, Pello Urizar, que acudió junto a Ikerne Badiola y Mariano Alava; y Txutxi Ariznabarreta, uno de los representantes de la red social Independentistak.