Vitoria. El presidente del Gobierno descartó ayer cambios en el Gobierno y comunicó al Rey que ya "están dadas las condiciones" para poder consolidar la recuperación económica de España, por lo que espera anunciar este mismo mes medidas para recobrar la inversión directa en infraestructuras.
Las perspectivas de la situación económica y laboral y los efectos de las medidas promovidas por el Gobierno a partir de mayo centraron las conversaciones entre don Juan Carlos y el jefe del Ejecutivo en el Palacio de Marivent, donde ambos se reunieron durante una hora en el primero de sus dos despachos veraniegos.
En una comparecencia al término del encuentro, Zapatero subrayó que la principal preocupación del Rey es consolidar la salida de la crisis, la estabilidad financiera y la recuperación económica en España "para que cuanto antes se pueda volver a crear empleo". El presidente del Gobierno transmitió al monarca que "en las últimas semanas se ha producido un proceso de estabilidad, consolidación y mayor sosiego en torno a la economía española" e insistió en que a ello ha contribuido el conjunto de medidas puestas en marcha por su Gabinete.
A su juicio, estas iniciativas, especialmente la impulsada para hacer público el nivel de solvencia de bancos y cajas, ha favorecido una menor presión sobre la deuda española y una mayor tranquilidad en torno a la fortaleza de las cuentas públicas y la capacidad de financiación del Estado y las entidades financieras.
estabilidad financiera "Será un proceso largo, pero esa debe ser la dirección en estos momentos; la estabilidad financiera es una condición imprescindible para que la recuperación económica se mantenga en los próximos trimestres", aseveró. En este sentido, subrayó que el crecimiento económico del 0,2% en el segundo trimestre del año "es un buen dato que confirma las previsiones del Gobierno y abre la expectativa a la recuperación", pese a considerar previsible que los datos del tercer trimestre no sean tan buenos, como ocurre "habitualmente".
Igualmente, destacó la importancia de que "se pongan en marcha cuanto antes" los diversos planes del Gobierno para fomentar la competitividad, como el plan industrial, y confió en que la consolidación económica permitirá a su vez una recuperación del empleo, para lo que el Gobierno impulsará "nuevas iniciativas". En este contexto, espera poder anunciar en diez o quince días el resultado del "esfuerzo" del Ejecutivo para "aliviar" el recorte de la inversión directa en infraestructuras y recuperar alguna de ellas de forma que se beneficien la "mayoría" de las comunidades. Este anuncio "supondrá un alivio, un empujón importante para las empresas constructoras", auspició Zapatero, quien reconoció que el recorte de infraestructuras, sobre todo en carreteras, ha sido "muy severo" (231 obras de más de un millón de euros).
Zapatero también tuvo ocasión de informar al Rey, con el que a diferencia de años anteriores no cenó, sobre la situación creada por la amenaza de huelga de los controladores aéreos, a los que el presidente pidió que acepten la última oferta de Fomento "cuanto antes" y no convoquen este paro por "responsabildad", ya que "no produce más que efectos negativos".
En su comparecencia, aseguró además que no hará a corto plazo cambio alguno en el Ejecutivo después de que la ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez, haya decidido participar en unas primarias para encabezar la lista de su partido a los comicios autonómicos de Madrid. "Nada hay cerca que haga pensar en algún cambio" de Gobierno, dijo Zapatero, quien insinuó que no se decantará por uno de los dos candidatos (Trinidad Jiménez y Tomás Gómez) porque, según él, ahora es el momento de escuchar a los aspirantes, una recomendación que se aplicará a sí mismo.
También comentó el presidente que está dispuesto a "aclarar, dialogar e informar" a Marruecos sobre las denuncias de agresiones a sus ciudadanos en la frontera con Melilla, pero subrayó que la Policía actúa con la "máxima corrección".