Bagdad. Al menos 45 personas murieron y 185 resultaron heridas en una serie de fuertes explosiones la noche del sábado en la ciudad de Basora, en el sur de Irak, comunicaron ayer las fuerzas de seguridad.
Según las informaciones, en un barrio densamente poblado de Basora estallaron un coche bomba, un explosivo convencional y un generador. Las fuerzas iraquíes bloquearon en la mañana de ayer gran parte de la ciudad portuaria.
En diversos ataques producidos ayer en el país, otras 16 personas perdieron la vida y 30 resultaron heridas, según fuentes policiales. El gobernador del distrito iraquí de Nínive, Atheel al Najifi, sobrevivió a un intento de asesinato en la ciudad de Mosul, durante el cual dos personas murieron y nueve resultaron heridas, informó la policía.
En la parte oriental de la misma ciudad, perdieron la vida tres policías en enfrentamientos con insurgentes, señalaron las fuerzas de seguridad, mientras que en otro barrio de la ciudad un explosivo mató a un hombre y causó heridas a su mujer. También en la región occidental de Irak se produjeron ataques. Siete personas murieron y otras ocho resultaron heridas cuando un atacante suicida se hizo saltar por los aires dentro de un vehículo cargado de explosivos en la ciudad de Ramadi, situada a unos 120 kilómetros de Bagdad.
Además, en un mercado en Bagdad un coche bomba dejó un muerto, informaron testigos, mientras que cuatro personas, entre ellos un policía, resultaron heridos en una explosión en el norte de la capital. En Faluyah otras dos personas murieron y siete más resultaron heridas tras estallar otro coche bomba dentro del aparcamiento de un garaje, informaron fuentes de seguridad de esa ciudad, situada unos 60 kilómetros al oeste de la capital.
En los últimos meses Irak ha vivido una ola de violencia a manos de insurgentes, elevando el número de víctimas especialmente en el mes de julio y en la primera semana de agosto, coincidiendo con el anuncio del presidente estadounidense, Barack Obama, de la retirada de tropas de combate de su país el próximo 31 de agosto.
En este sentido, el general Raymond Odierno, comandante de las tropas de EEUU en Irak, afirmó ayer que este país está "listo" para asumir las operaciones de seguridad ante la salida de la mayoría de las tropas estadounidenses a finales de este mes. "Creemos que están listos para asumir las operaciones plenas en Irak", afirmó Odierno a la cadena ABC desde Bagdad. "Es algo sobre lo que hemos venido trabajando con las fuerzas de seguridad iraquíes durante mucho tiempo", aseguró.