bagdag. El índice de la violencia en Irak ha vuelto a subir el pasado mes de julio, en el que murieron 535 personas, muy por encima de los 284 fallecidos en junio pasado, informaron ayer fuentes del Ministerio del Interior.

Las fuentes explicaron que, además, otras 1.043 personas resultaron heridas en julio en las distintas provincias del país, sin incluir la región autónoma del Kurdistán iraquí. Sin embargo, en una acción poco habitual, el Ejército estadounidense en Irak rechazó esos números en un comunicado y señaló que, según su recuento, fueron 222 los fallecidos en el mes de julio pasado y 782 los heridos.

Además, mientras que las fuentes del Ministerio del Interior apuntan que entre los muertos se encuentran 89 policías y soldados iraquíes, el mando militar de EEUU en Irak sostiene que fueron 55 los miembros de las fuerzas de seguridad del país árabe los que perdieron la vida ese mes.

Según las fuentes iraquíes, las víctimas se han producido debido a ataques con cuatro coches bomba, 24 asesinatos con pistolas con silenciaores, dos atentados con cinturones de explosivos, 136 artefactos explosivos y 113 proyectiles de mortero.

Aunque el Ejército de EEUU no detalla los tipos de ataques, sí destaca que el mes pasado fue el tercero con menos incidentes violentos desde enero del 2008 y el octavo con menos víctimas desde esa fecha.

Es poco habitual que el mando militar norteamericano desmienta las cifras de violencia que difunden las autoridades iraquíes cada mes. Las fuerzas de Estados Unidos no suelen difundir su propio recuento mensual de víctimas.

En la actualidad, el Ejército de EEUU ultima los preparativos para reducir el número de efectivos desplegados en Irak de 140.000 a 50.000 a finales de este mes.