El conflicto entre Corea del Sur y Corea del Norte escaló ayer verbalmente, después de que el régimen comunista amenazase con "ataques militares ilimitados" contra las instalaciones de altavoces desde las que emiten propaganda los surcoreanos, según informaron ayer medios en Seúl. Incluso la capital surcoreana, Seúl, podría convertirse en un "mar de llamas", advierte el Ejército norcoreano en un comunicado publicado ayer por los medios estatales. Pyongyang ya utilizó esa metáfora en otras ocasiones contra su vecino del sur..