Bruselas. El rey de Bélgica, Alberto II, seguía ayer sin disolver el parlamento y convocar elecciones anticipadas. Pero sin ni siquiera esperar a este anuncio, el país entró de lleno en la campaña electoral. El dimitido primer ministro, Yves Leterme, hizo pública su renuncia a liderar el democristiano CD&V en las próximas elecciones legislativas. Su lugar lo ocupará la presidenta del partido, Marianne Thyssen.

"Es una decisión valiente y difícil", valoró el ministro-presidente de Flandes, Kris Peeters. "Ha tomado su decisión él sólo y Marianne Thyssen ha aceptado sucederle como cabeza de lista, es lo más importante", añadió. Para otros la decisión es sorprendente. "No había avisado siquiera a sus colegas de gobierno", indicó la viceprimer ministra, la socialista Laurette Onckelinx. Con este movimiento, Leterme asume el fracaso a tres años marcados por una crisis constante en los que ha dimitido hasta en cinco ocasiones como formador del gobierno y primer ministro y durante los que ha dirigido dos ejecutivos.

"Asumo la responsabilidad de que hasta ahora las estrategias utilizadas no han tenido éxito", explicó ayer Leterme. Su programa de gobierno abogaba por más autonomía para Flandes pero los intentos por reformar las instituciones belgas y solucionar la escisión del distrito electoral Bruselas-Hal-Vilvoorde (BHV), que enfrenta desde hace años a flamencos y francófonos. Esta última cuestión, fue la que terminó por hundir el pasado jueves a la coalición de gobierno. Los liberales flamencos del Open VLD endurecieron su postura y abandonaron el gobierno por la falta de progresos en esta negociación.

Una decisión que los partidos francófonos entienden como un movimiento táctico de cara a las elecciones con el fin de recobrar el espacio político perdido en Flandes frente al partido de Leterme. Tras las consultas con los partidos políticos, que el rey dio por concluidas, hoy tendrá lugar un consejo de ministros que tratará de despejar el camino a la convocatoria de elecciones.

Ayer, la futura candidata del CD&V dejó claro sus objetivos. "No estamos a favor del fin de Bélgica, sino por una reforma del Estado", recordó Thyssen. Si Leterme pasa a la segunda línea, la presidenta de los democristianos aclaró que el primer ministro en funciones seguirá siendo importante "antes, durante y después de las elecciones". La fecha que manejan para acudir a las urnas es el 6 o el 13 de junio.