Londres. Un nuevo sondeo publicado por el periódico The Mail on Sunday sitúa al Partido Liberal Demócrata como la primera fuerza política en intención de voto en el Reino Unido, a menos de tres semanas de que se celebren las elecciones.

La encuesta, elaborada por la empresa demoscópica BPIX, indica que de celebrarse hoy las elecciones el partido liderado por Nick Clegg sería votado por el 32% del electorado, seguido por el Partido Conservador de David, que obtendría el 31%, y por el Partido Laborista del primer ministro, Gordon Brown, que lograría el 28%.

El dato está en la línea de otras encuestas, que reflejan el vuelco electoral generado por la victoria de Clegg, el pasado jueves, en el primer debate televisado de la Historia electoral del Reino Unido entre los candidatos a primer ministro.

Otros sondeos publicados ayer por la prensa británica coinciden en que los liberal demócratas figuran segundos, por detrás de los tories pero por delante de los laboristas, en una lucha muy estrecha, que apunta a un Parlamento sin una mayoría clara, algo que no ha ocurrido en el Reino Unido desde la legislatura 1974-1979.

vuelco Pero la novedad de la encuesta del Mail es que, por primera vez en más de un siglo, los liberal demócratas están por delante. El diario recuerda que la alianza que formaron en la década de 1980 el Partido Socialdemócrata y los liberales estuvo brevemente por delante en las encuestas, un dato que no confirmaron las urnas, y que hay que remontarse a 1906, antes de que hubiera sondeos, para ver a los liberales como los preferidos por el electorado.

Aquel año, los liberales ganaron las elecciones con más del 50% de los votos, liderados por Henry Campbell-Bannerman.

Trasladada a la composición del Parlamento si los resultados se reprodujeran el 6 de mayo, la encuesta implica que, pese a ser porcentualmente la fuerza más votada en el conjunto del país, los laboristas tendrían la mayor representación parlamentaria.

Gordon Brown tendría la opción de prolongar cinco años más un Ejecutivo laborista (en el poder desde 1997), con el apoyo de 267 parlamentarios, frente a los 230 que lograría el Partido Conservador y los 121 de los liberal demócratas.

Esto abriría la puerta a un Gobierno de coalición entre laboristas y liberal demócratas, una opción política inédita que es la preferida de los británicos, según la encuesta.

El llamado efecto Clegg condiciona desde el jueves el transcurso de la campaña política, que cuando arrancó parecía una carrera de laboristas y conservadores, con una clara ventaja de los tories frente a un Gobierno desgastado.