Irán celebra hoy el 31er aniversario de la Revolución Islámica divida y acuciada por unos problemas económicos y un descontento popular graves. Los líderes de la oposición, en sus páginas web, han instado a la población a que tome las calles mientras que las autoridades iraníes han advertido de que los reformistas recibirán una firme respuesta si intentan prorrumpir en las celebraciones.