barcelona. El presidente de CiU, Artur Mas, prometió ayer que, si dispone de una "gran mayoría" tras las elecciones catalanas, formará un gobierno con los "mejores", con la gente "más preparada", en el que no todos sus miembros serán de CiU.
En un acto en Vall d"Hebron (Barcelona), el escenario donde hace ocho años fue proclamado sucesor de Jordi Pujol, Mas desveló su intención de trasladar a un futuro Govern el espíritu aglutinador y transversal que quiere imprimir a su proyecto de Casa Grande del Catalanismo: "Será el gobierno de la gran mayoría", dijo.
"Mi compromiso personal es que el próximo gobierno será el gobierno de la mejor gente de este país (...), que tenga realmente algo importante que aportar. Si esta gente es de CiU, mejor que mejor, y si en algún lugar alguien de fuera de CiU está mejor preparado que alguien de dentro, también lo iremos a buscar", prometió.
En el acto de su proclamación como candidato por tercera vez a la presidencia de la Generalitat, Mas no quiso dar nombres de las personas en las que está pensando para su fórmula de gobierno, que podría guardar semejanzas con los fichajes de reconocidos izquierdistas que hizo para el gobierno francés Sarkozy.
Mas advirtió que para que Cataluña "no baje más por la pendiente de la mediocridad", hay que afrontar un cambio con tres ejes: economía, autogobierno y valores. Su "primera prioridad", avanzó, será "superar la crisis", porque "sobre un país empobrecido no podremos construir nada bueno". Otro de los vectores de su cambio pasa por proyectar la nación catalana y por no permitir que Cataluña "se convierta en una provincia española", lo que implica en primer término mantenerse "fiel" a la voluntad del pueblo de Cataluña expresada en las urnas. Y, el tercer terreno en el que quiere traer un cambio es para recuperar "los valores de la catalanidad", que incluyen el espíritu de iniciativa y la mentalidad creativa, enfrentados a las actitudes funcionariales y "burocráticas".