vitoria. La alerta del ministro del Interior no ha tenido mejor acogida entre la clase política que la encontrada entre los sindicatos policiales. Sólo el presidente de los populares vascos, Antonio Basagoiti, y la portavoz del Gobierno Vasco, Idoia Mendia, manifestaron ayer implícita o explícitamente su adhesión a la decisión del titular de Interior. El resto de valoraciones de las formaciones políticas oscila entre la calificación de "intoxicación" hasta la de "irresponsabilidad" o "imprudencia".

Basagoiti eludió valorar el hecho del anuncio en sí para centrarse en su contenido y advertir a ETA de que no logrará sus objetivos "ni con 10 secuestros ni con 40 bombas". Sí entró en la forma del asunto la portavoz del Gabinete López, Idoia Mendia, quien, tras el Consejo de Gobierno, afirmó que si el ministro del Interior ha advertido del riesgo de un secuestro por parte de ETA, "es que, sin duda, existe", y consideró que es su "obligación" darlo a conocer. A partir de ahí, poca comprensión del arco parlamentario hacia la decisión de Rubalcaba de hacer pública esta alerta.

Así, el portavoz del PNV en el Congreso, Josu Erkoreka, sostuvo que los cargos públicos "no están para provocar la alarma en la población y menos aún para jugar con datos reales o ficticios que puedan permitir poner en marcha operaciones propagandísticas". En vivo contraste con su compañero de filas Antonio Basagoiti, el vicesecretario de Comunicación del PP, Esteban González Pons, dijo que el ministro "está nervioso" y cometió una "imprudencia" porque ha generado "inquietud", precisamente de lo que viven los terroristas: "Nos llama la atención que el mismo Gobierno que, en los secuestros del Alakrana, o de los cooperantes, nos pide a todos prudencia y responsabilidad, sea el que se muestra menos prudente cuando se trata de un secuestro de ETA".

Mucho más contundente, el coordinador general de Aralar, Patxi Zabaleta, lamentó la "intoxicación intencionada" que para él supone este aviso, que atribuyó a un ánimo de "provocar", "incitar" y "ocultar" los "fracasos" socialistas. En otra clave de análisis, la secretaria de Comunicación de EA, Ikerne Badiola, consideró que Rubalcaba se guió por el "pánico que a los partidos españolistas les da la posibilidad de que se materialice la unidad de acción abertzale".

Hamaikabat exigió al ministro "más sentido de responsabilidad y menos operaciones propagandísticas", en tanto que el coordinador general de EB, Mikel Arana, consideró la alerta una "auténtica irresponsabilidad" con la que el PSOE pueden pretender "influir en el debate interno de la izquierda abertzale".