madriD. El Gobierno se mostró ayer satisfecho por la aprobación definitiva en el Pleno del Congreso de los Presupuestos Generales del Estado para 2010, unas cuentas públicas que el Ejecutivo define como las de "de la recuperación económica". Así lo pusieron de manifiesto el presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, y la vicepresidenta segunda y ministra de Economía, Elena Salgado, en los pasillos de la Cámara Baja después de que el Pleno diera luz verde a las Cuentas para el próximo año.

Zapatero respondió con un "ha estado muy bien" cuando se le preguntó si estaba contento con la aprobación del texto presupuestario y Salgado se congratuló del respaldo que han recibido las Cuentas "para la recuperación económica y para la protección social". Y es que, según destacó la vicepresidenta económica del Ejecutivo, ambos son "en este momento" los dos factores más importantes que conforman la política económica del Gobierno socialista.

posturas Por su parte, el portavoz del Grupo Socialista en el Congreso, José Antonio Alonso, destacó que el modo en el que finalmente han sido apoyados los presupuestos evidencia la "fortaleza política" del Ejecutivo y que los socialistas "saben acordar con prácticamente todo los grupos", frente a un PP al que sigue viendo "solo". "Hemos optimizado al cien por cien nuestros recursos negociadores", agregó Alonso, quien presumió de que, tras el acuerdo global que su grupo cerró en el arranque de la tramitación con PNV y CC, después fue capaz de pactar enmiendas con la inmensa mayoría de las formaciones del arco parlamentario.

En la votación de ayer los socialistas contaron con el apoyo global de PNV, CC y BNG, mientras que los diputados de ERC e IU-ICV sólo se comprometieron a refrendar las enmiendas de la Cámara Alta.

Desde el PP, Cristóbal Montoro subrayó que los del año que viene son los Presupuestos "más falsos" de la historia y criticó al Gobierno por no tener credibilidad y por realizar un discurso triunfalista.

Por su parte, el diputado de CiU Pere Macías denunció unos Presupuestos "malos y pésimos" para España, para Cataluña y para la generación de empleo y la economía productiva, y responsabilizó a todos los diputados que votaron a favor.

Por ERC-IU-ICV se subrayó que no apoyan las cuentas del Estado porque "no responden a lo que necesita la sociedad ni la economía".

Los Presupuestos Generales del Estado para 2010 cuentan con un límite de gasto de 182.439 millones de euros y prevén unos ingresos mucho menores, de 121.360 millones, con lo que el Gobierno ya espera un déficit estatal del 5,4% del PIB.