Vitoria. Es un mensaje de apenas quince minutos de duración, con un par de veladas referencias a la actualidad entre diferentes tópicos tradicionales en la Corona, una intervención anual cuyo comentario de texto se antoja complicado para los profesionales de la comunicación y casi imposible para el común de los ciudadanos. Sin embargo, el mensaje del Rey del jueves tendrá un significado especial, más allá de las palabras que pueda pronunciar el monarca y de las interpretaciones que unos y otros hagan de su discurso.
Esta Nochebuena será la primera de la historia en la que ETB retransmitirá el tradicional mensaje real, tal y como se anunció ayer en el Parlamento Vasco. El director general del ente, Alberto Surio, acudió a la Comisión de ETB para confirmar que atenderá a la recomendación de la Cámara, que apostó por la emisión del real comunicado como un símbolo más del camino hacia la "normalidad institucional" que persiguen el PSE y su socio preferente, el PP.
Pese a que unos enmarcan la decisión en esa "normalidad" a la que aspiran, y otros consideran la emisión un problema menor dentro de la coyuntura económico social que atraviesa Euskadi, la retransmisión del mensaje por el segundo canal de Euskal Telebista encierra un hondo carácter político, como pusieron de manifiesto ayer todos los intervinientes, el primero de ellos el propio Surio.
"Esta decisión tiene mucho que ver con el papel de servicio público de ETB, que incluye la defensa activa de las instituciones que han posibilitado nuestro autogobierno", afirmó el director de la radiotelevisión pública vasca, quien aprovechó para reivindicar tanto su independencia como la autonomía que de ella deriva. Surio recordó que, pese a la recomendación del Parlamento, las apuestas de parrilla son competencia exclusiva de la dirección del ente, pues "ni siquiera el Consejo de Administración" tiene voto en esta materia.
Pese a la marea que generó en todo el arco político vasco la apuesta de ETB por emitir el mensaje, la decisión ratificada ayer no supone ninguna sorpresa. Su confirmación, sin embargo, trasladó el debate hacia uno de los frentes de batalla más comunes en la presente legislatura, el del nivel de legitimidad de que goza un gobierno en el que no está presente el partido más votado.
desproporción exagerada "Creo que las condiciones sociopolíticas de este país no han cambiado y que la opinión de la gente al respecto sigue siendo la misma", aseguró el jeltzale Iñigo Iturrate. Surio aceptó que la mayoría social de Euskadi "no es la mayoría política" que "se ha posicionado a favor de la emisión", pero recordó que "nadie está obligado a ver ningún mensaje".
El director de ETB añadió que el revuelo montado en torno a estos quince minutos de programación ya justifica el interés informativo de los mismos, aunque él ve en las críticas nacionalistas un intento de "utilizar este tema como un símbolo, porque no sacar al Rey era un gesto de desafección hacia el Estado español".
Surio detecta "un punto de desproporción exagerada" en la postura del PNV, pues el "respeto" que ETB va a mostrar hacia el Rey es el mismo que ponen en práctica las instituciones guipuzcoanas, gobernadas por los jeltzales, cuando asisten a los actos del monarca en el territorio.
Para Iturrate, en cambio, son el PP y el PSE quienes quieren hacer "comulgar con las ruedas de molino del constitucionalismo español incluso a muchos de sus votantes".
Ayer el resto de grupos no tenían voz en este punto de la comisión, pero no tardaron en hacer pública su opinión con respecto a la controvertida emisión televisiva.
Para Aralar, la decisión de retransmitir el mensaje del Rey "no se ha hecho pensando ni en la audiencia, ni en un modelo de televisión del siglo XXI ni en las ciudadanas y ciudadanos vascos; se ha tomado sin tener en cuenta el sentir de la ciudadanía vasca, es decir, mayoría de los telespectadores de EITB", señaló Mikel Basabe.
De similar opinión son en Ezker Batua. Mikel Arana achacó la programación de la noche del 24 a las "servidumbres políticas" que atan a socialistas y populares. "El nuevo equipo de dirección, abstrayéndose de los criterios técnicos, de audiencias y de interés informativo, ha hurtado la decisión al Consejo de Administración y ha puesto al ente público al servicio del acuerdo PSE-PP, en contra de la opinión mayoritaria de la ciudadanía vasca", censuró.
Por parte de EA, Jesús María Larrazabal se mostró convencido de que la emisión del mensaje real "es un paso más de PSE y PP en su intento de españolizar la CAV; es otra novedad del cambio político, que tiene reflejo en muchas cosas y ahora lo va a tener también en la pretendida presencia de Juan Carlos I en ETB". Todo ello, partiendo de la base de que esta polémica "no es un problema de vida o muerte".