Ramala. El órgano legislativo de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) prorrogó ayer seis meses el mandato del Parlamento palestino y del presidente Mahmud Abbas. En su segundo día de reunión en la ciudad cisjordana de Ramala, el Consejo Nacional Palestino (CNP) decidió trasladar al 28 de junio de 2010 las elecciones presidenciales y legislativas inicialmente convocadas para el próximo enero, explicó la fuente cercana a las reuniones a varios periodistas.
El órgano de la OLP, representante legal del pueblo palestino, también determinó a puerta cerrada prorrogar el mandato del Parlamento palestino, que controla el movimiento islamista Hamás tras su victoria en las elecciones legislativas de 2006. La decisión, no confirmada oficialmente, concuerda con la propuesta de reconciliación presentada por mediadores egipcios a los dos principales movimientos palestinos, Hamás y Al-Fatah, y que fija la celebración simultánea de elecciones en Gaza y Cisjordania en junio de 2010. Desde junio de 2007, Hamás gobierna Gaza, mientras que la Autoridad Nacional Palestina (ANP) -que vertebra Al-Fatah- sólo controla Cisjordania. "La decisión del Consejo Central fue tomada para dar una oportunidad a la reconciliación interpalestina", señaló la fuente, antes de precisar que Abbas presidirá tanto la ANP como la OLP hasta que se celebren los comicios.
Hamás Por su parte, Hamás rechazó la prórroga del mandato del presidente palestino, Mahmud Abbas, y la convocatoria de elecciones para el próximo 28 de junio, decididas hoy por el Consejo Nacional de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP). "Cualquier cosa decidida por el Consejo Nacional es ilegal", afirma el movimiento islamista en un comunicado enviado a los medios de prensa, en el que explica que "las competencias del Consejo han expirado y no obligan a nadie del pueblo palestino".
"La legitimidad (constitucional) proviene del pueblo palestino, no del Consejo Central o Nacional o cualquier otro consejo o institución cuya autoridad ha expirado", agrega la nota de Hamás al cuestionar la vigencia de la OLP, de la que no forma parte pero que representa los intereses palestinos ante la comunidad internacional.