Los 21 diputados del ilegalizado Partido de la Sociedad Democrática (DPT), pro kurdo, abandonaron ayer el Parlamento turco. "No participaremos en las actividades parlamentarias" a partir de ayer, dijo el presidente del DTP, Ahmet Turk, a quien el Tribunal Constitucional turco le prohibió el viernes cualquier actividad política en los próximos cinco años. El DTP reaccionó a la polémica decisión del Tribunal, tras una reunión celebrada ayer en la sede del partido, afirmando que ha trabajado por la paz y para poner fin a los enfrentamientos, pero que pese a ello ha sido considerado "como terrorista". Türk reconoció que, "tenemos amigos que están luchando por la democracia". Por su parte, el miembro del DTP Sirri Sakik confirmó que los 21 diputados del partido ilegalizado presentaron ya sus cartas de dimisión. Los 11 magistrados del Tribunal Constitucional dictaminaron por consenso que el DTP ha sido un foco de acciones dirigidas contra la unidad del país, y que ha mantenido contactos con el proscrito Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), considerado grupo terrorista por Ankara, EEUU y la Unión Europea.