teherán. El líder supremo de la Revolución iraní, ayatolá Ali Jameneí, insistió ayer en que Estados Unidos y el Reino Unido son los dos principales enemigos de Irán y afirmó que ninguno de los dos Estados podrán detener el progreso nuclear de la República Islámica.
La máxima autoridad iraní reiteró que el desarrollo de la energía atómica es un derecho inalienable y un objetivo nacional a los que el régimen de los ayatolá no va a renunciar. Por ello, Jameneí acusó a Washington y Londres de conspirar para confundir a la opinión pública sobre la naturaleza del programa nuclear de Irán, que, según sus palabras, es puramente pacífico. "Durante los pasados 30 años han intentado aislar a esta nación y a este país a través de sus conspiraciones. Sin embargo, han fracasado, y Dios mediante fracasarán durante los años venideros", señaló. "La nación iraní se esforzará hoy al máximo para alcanzar el conocimiento de la energía nuclear, conseguir así que en los próximos 20 ó 30 años los hijos de Irán y las futuras generaciones no tengan que suplicarla", afirmó.
Gran parte de la comunidad internacional, con Estados Unidos a la cabeza, acusa al régimen de los ayatolá de ocultar, bajo su programa nuclear civil, otro de naturaleza clandestina y aplicación bélica, cuyo objetivo sería adquirir armas atómicas.
Cabe destacar que el Gobierno de Teherán niega las alegaciones e insiste en que su meta es la generación de electricidad y otras aplicaciones civiles.